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SECCIÓN: "PASO A LA MUJER TRABAJADORA"
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03/06/2014

CHILE

El gobierno de la Concertación, de los golpistas de la Democracia Cristiana, los ministros de la Bachelet y los “pacos de rojo” del estalinismo, administradores del régimen cívico-militar pinochetista del TLC, quiere ocupar las calles que son de la clase obrera y la juventud rebelde

El 1° de Mayo: el primer acto en las calles del gobierno de colaboración de clases de la Bachelet, lacayo del imperialismo

Nuevamente la Concertación gobierna Chile. El hecho político distintivo de las elecciones donde ganó Bachelet fue el 60% de abstención, el más alto en la historia de la “democracia” chilena. Sin embargo la burguesía ha montado una enorme trampa y engaño contra las masas trabajadoras, maquillando y vistiendo a Bachelet como un gobierno que con sus leyes viene a resolver los grandes problemas de las masas. Para ello se puso en marcha un gran frente de colaboración de clases con el PC como parte del gobierno junto a la Concertación llamándose “Nueva Mayoría”, y con la CUT y toda la burocracia sindical apoyándolo, dándole plena continuidad al régimen cívico militar pinochetista. Quieren ocultar que el de Bachelet es un gobierno completamente pro imperialista, su TLC y su Transpacífico.

Vea también:

- El 1º de Mayo en Chile:
Un acto del gobierno de la Concertación de la Bachelet y su régimen cívico-militar, animado por sus ministros burgueses, el PC
y la burocracia de la CUT

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- Nuevamente sobre el PTR
y su política ante el frente popular
El gobierno de la Bachelet, ¿un gobierno “débil” para enfrentar al imperialismo?
o el encargado de aplicar los planes de Obama y Wall Street en Chile
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- A propósito de la marcha “opositora” a la burocracia de la CUT el 1º de Mayo
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El gobierno de Bachelet puede asentarse y comandar esta gran trampa para impedir que vuelva el combate revolucionario de la clase obrera y la juventud, porque se apoya en la derrota que le impusieron las direcciones del proletariado en 2013 y principios de 2014 a lo más aguerrido de la clase obrera como a los Portuarios de Mejillones, a los mineros que tienen la llave para expropiar el cobre como los de El Teniente, Collahuasi etc. y antes habían sacado de escena al movimiento estudiantil revolucionario impidiendo el camino a la huelga general para barrer con el gobierno de Piñera y el régimen cívico-militar pinochetista y abrir la segunda revolución chilena. El gobierno de Bachelet, en un verdadero frente de colaboración de clases, viene a impedir que vuelva el grito en las calles de “Renacionalización sin pago bajo control obrero del cobre para conquistar la educación gratuita”.

Aunque las direcciones reformistas quieran engañar y confundir al movimiento obrero y la juventud con política de colaboración de clases, como se vio en el acto del gobierno el 1 de mayo pasado, los explotados ya conocen a la Bachelet. En su anterior mandato en el año 2006 fue la encargada de reprimir al movimiento obrero y estudiantil que se levantaban en las calles en contra de las miserables condiciones de vida y por la educación gratuita. Reprimió salvajemente con la policía que estaba dirigida en esos años por la actual ministra del Trabajo y Previsión Social, Javiera Blanco que estaba a cargo de “Subsecretaria de Carabineros de Chile”. ¡Este gobierno es el responsable de la muerte del obrero forestal Rodrigo Cisternas y el comunero mapuche Matías Catrileo! ¡Muertos por la policía de la “socialista” Bachelet y su actual Ministra del Trabajo en el año 2006!

Entonces, el proceso de asentamiento del gobierno pro-imperialista de Bachelet es sobre la base de mil traiciones al proletariado y la juventud. Pero fundamentalmente la trampa en curso de este frente de colaboración de clases que va desde los golpistas de la DC hasta el PC, donde todo el reformismo dice que “hay una santa alianza del imperialismo y la derecha” para terminar sosteniendo a la “débil” Bachelet, es parte de una política internacional de pactos contrarrevolucionarios para derrotar a la clase obrera, los campesinos pobres y al movimiento estudiantil combativo.
Es que el gobierno de Bachelet, es hijo del pacto continental de Obama y las burguesías bolivarianas y del TLC para desviar y abortar cualquier intento de combate revolucionario de masas desde Alaska a Tierra del Fuego. Se trata de una política de colaboración de clases internacional para someter al proletariado a Obama y sus agentes. Es este Pacto Obama-Castro el que se está restaurando el capitalismo en Cuba; en Colombia se expresa como el pacto de Uribe/Santos con el castrismo y los bolivarianos para desarmar y aplastar la resistencia y legitimar las 7 bases militares yanquis en ese país, y para ello la dirección de las FARC y su partido Unión Patriótica llama a votar en la "segunda vuelta" por Santos; es parte del pacto Maduro-MUD en Venezuela para atacar a las masas a cuenta del FMI. Es esta misma política la que se aplica en Chile para desviar e impedir la revolución. Estos son los resultados de las dos cumbres de la CELAC, que no por nada se realizaron en Chile y Cuba.


Rodrigo Cisternas


Matias Catrileo

Por ello afirmamos que este gobierno nada bueno le dará a los explotados. En el mejor de los casos, sólo dará algunas limosnas para asentarse e impedir que los explotados vuelvan al combate. A esto se reduce su trampa que es el programa de la Bachelet y sus “cuatro reformas” que buscan el objetivo de hacerles creer a los explotados que será este gobierno lacayo del imperialismo y administrador del TLC el que pueda otorgarle sus demandas.
Estamos ante un vil engaño contra los explotados. La Bachelet habla de una “Reforma Tributaria” con la cual financiar la “Reforma Educacional”, es decir, que sean la clase obrera y las masas explotadas las que paguen más impuestos para otorgar un puñado de becas en algunas universidades a un sector minoritario. ¡Cínicos! Los explotados de Chile ya marcaron un camino para conquistar sus demandas, que era la ¡Renacionalización sin pago y bajo control obrero del cobre para financiar la educación gratuita y el salario obrero! ¡Esta es la “reforma Tributaria” que hay que hacer! Está claro que las “reformas” de la Concertación son para que nunca más este grito de guerra vuelva a escucharse y así salvaguardarle la propiedad y los negocios a sus amos imperialistas de las transnacionales del cobre.

Otra gran estafa es la “Reforma Constitucional” con la cual sólo buscan limar las aristas de este maldito régimen cívico-militar que resultan más irritantes para las masas. Pues cada lucha de la clase obrera puso en cuestión este régimen basado en la reaccionaria Constitución del '80. El derrocamiento revolucionario de este régimen pinochetista con la Huelga General abriendo la segunda revolución chilena, es la tarea que una y otra vez las direcciones traidoras le han impedido a las masas chilenas. El gobierno de Bachelet, es el gobierno mas de “izquierda” que puede tener este régimen cívico-militar donde la clave es preservar de conjunto al corazón del estado burgués que son sus FF.AA pinochetistas, que en Chile son los agentes de las trasnacionales y se llevan el 10% del saqueo del Cobre.

Ahora el gobierno ha salido a anunciar su “cuarto pilar”: la “Reforma al Código del Trabajo”, anunciando una posible “negociación colectiva real”, es decir “cambiando” algo para que todo siga igual, para que las filas obreras continúen totalmente divididas, para que sigamos trabajando en las peores condiciones de esclavitud y flexibilización laboral, para que el proletariado chileno sea uno de los más súper-explotados del mundo. La esencia es que serán los explotadores los que seguirán reglamentando cómo debemos organizarnos los trabajadores, mediante sus malditas leyes, cuestión que es garantizada por esos traidores de la burocracia de la CUT, los guardianes del régimen cívico-militar y de su Código del Trabajo pinochetista. Ahora quieren que los trabajadores nos conformemos con la modificación de tal o cual artículo, cuando la clase obrera cada vez que salió a pelear, tuvo que barrer primero en las calles con ese Código del Trabajo, como lo demostraron, por dar tan solo un ejemplo, los obreros portuarios unificándose entre los contratados y los eventuales y a nivel nacional en la Unión Portuaria. ¡Que el gobierno de la Bachelet y los burócratas de la CUT discutan con Obama y los parásitos de Wall Street sus reglamentaciones! ¡Los trabajadores nos organizamos como queremos! ¡Fuera las manos del estado de todas las organizaciones obreras! 

La Bachelet no vino a resolver las necesidades de las masas, sino a terminar de expropiar el combate revolucionario de los explotados. A esto se reduce el rol que tiene este gobierno de colaboración de clases: viene a adormecer a las masas con falsas ilusiones y con promesas de “reformas”, mientras prepara golpes certeros contra el corazón de la vanguardia obrera y juvenil para cerrar el camino de las masas a la revolución y terminar de expropiar su combate por la “renacionalización sin pago y bajo control obrero del cobre”, sin pago y bajo control obrero, para financiar la educación gratuita y todas las demandas de los explotados, que puso en cuestión la propiedad del imperialismo.
¡Esta es la verdadera cara de este gobierno antiobrero que viene a garantizar todos los planes de hambre, saqueo y esclavitud redoblando su ataque contra la clase obrera y los explotados al servicio de sus amos imperialistas! Este es el gobierno pro-imperialista de la “Piñelet” que encabeza el régimen cívico-militar pinochetista de la Concertación, la Derecha y el PC, asentado en la Constitución del '80.

El pasado 1° de Mayo con su marcha-acto fue la primer acción decisiva que tuvo este gobierno para volver a recuperar las calles donde la clase obrera y su juventud combativa no se cansaron de enfrentar, no sólo al régimen cívico-militar, sino también a sus distintos gobiernos como el de Piñera. Así también fue el anterior gobierno de la Bachelet que fuera acorralado en 2006 por un ascenso de masas, encabezado por el heroico movimiento estudiantil al grito de “el cobre por el cielo y la educación por el suelo”. E incluso contra los “pacos de rojo” del PC que eran expulsados de las organizaciones estudiantiles, de las tomas de colegios y universidades, de las barricadas y marchas.
El 1° de Mayo con el acto de este gobierno de colaboración de clases, garantizado por la burocracia de la CUT, fue un botón de muestra de lo que buscan los explotadores: volver a recuperar definitivamente las calles que fueron tomadas por los mil y un combates que protagonizó estos años la clase obrera y la juventud chilena contra sus verdugos para someterlos y expropiar su lucha.

El otro botón de muestra se vio el 21 de Mayo en las calles de Valparaíso. Como todos los años, las distintas corrientes de izquierda organizaron una “contra-marcha” en esa fecha cuando el presidente rinde cuentas públicamente en esa cueva de bandidos del Parlamento. Esa es la fecha donde se centraliza toda la izquierda reformista y se dividen las tareas.
El año pasado no terminaban de juramentar hacer “un 2013 combativo como el 2011” que culminaron esa jornada todos juntos marchando detrás de la columna del PC. ¿Qué fue su “2013 combativo”? Mientras la burocracia del PC en la CUT traicionaba abiertamente cada combate protagonizado por la clase obrera, como la lucha de los portuarios y de los mineros, corrientes como el MIR y el FEL fueron las encargadas de llevar a los sectores más combativos del movimiento obrero y estudiantil al callejón sin salida de las instituciones del régimen burgués. Fueron estas corrientes las que garantizaron la división de los sectores que estaban peleando, impidieron que se forjara en las calles la unidad obrero-estudiantil manteniendo dividido al movimiento estudiantil de sus mejores aliados: la clase obrera. Fueron ellos los que vaciaron los organismos de lucha que las masas pusieron en pie como la ACES. Y con sus “asesores sindicales” llevaron a lo más combativo del proletariado chileno, como los portuarios de Mejillones, a los pies de la justicia pinochetista.

Movilización en 2013

De esta manera, la política de la izquierda reformista fue impedir que surja una poderosa Coordinadora Nacional de Lucha para centralizar y reagrupar a todos los sectores que estaban peleando y a la vanguardia obrera y estudiantil. La esencia de su política fue cerrar el camino a la Huelga General Revolucionaria con la cual echar abajo al gobierno, hacer volar por los aires al régimen burgués y avanzar en conquistar todas las demandas de los explotados. Todos ellos fueron los que cerraron esta perspectiva que la clase obrera y la juventud combativa conquistó en las calles y puso a la orden del día, como en el paro portuario de marzo-abril, las jornadas de lucha del 26/6 y del 11/7, y nuevamente en la huelga encabezada por los portuarios de Mejillones en diciembre pasado.
En todas estas oportunidades estas corrientes se dedicaron a forjar la unidad de los “dirigentes por arriba”, para mantener divididas las filas de la clase obrera y los estudiantes. Así no sólo a cada paso sostuvieron a la burocracia estalinista de la CUT, sino que junto a ella le salvaron así la vida al régimen cívico-militar pinochetista del combate revolucionario de las masas que hoy pone a la Bachelet para terminar esta tarea.
Estas corrientes cumplieron muy bien su rol. Por eso este 21 de Mayo mientras el PC ovacionaba a su presidenta en las puertas del Congreso en Valparaíso, estas corrientes realizaron tan sólo una marcha testimonial protagonizada por los que realizaron mil promesas de victoria y sólo le dejaron a la clase obrera y las masas explotadas jalones de derrotas.

La única salida para la clase obrera y la juventud combativa para conquistar el pan, trabajo, salario, la educación gratuita, salud y vivienda, para enfrentar el ataque del gobierno, reincorporar a todos los trabajadores despedidos, comenzando por los portuarios de Mejillones, es retomar el camino revolucionario del 2011, por la “renacionalización sin pago y bajo control obrero del cobre” y por que vuelvan los Cordones Industriales para abrir la segunda revolución chilena porque ¡Chile será socialista o será colonia!

Para ello la tarea del momento es imponer la ruptura con el gobierno, la burguesía y su parlamento fantoche de todas las organizaciones de lucha de la clase obrera y la juventud rebelde. Por eso es urgente conquistar un Congreso nacional de emergencia con delegados de base de toda la clase obrera, encabezado por los portuarios y los mineros, junto a los estudiantes combativos y los explotados en lucha para echar a la burocracia de la CUT y de todas las organizaciones obreras y estudiantiles, refundar al movimiento obrero de abajo hacia arriba contra el Código del Trabajo pinochetista y conquistar el camino a la Huelga General revolucionaria contra el régimen pinochetista, su gobierno y todos los agentes de Obama y Wall Street, el TLC y el Transpacific.

¡Hay que imponer la ruptura de nuestras organizaciones con la burguesía! ¡Hay que pelear con el método de la asamblea, los comités de fábrica y la democracia obrera!
¡Hay que refundar la ACES que “avanza y no transa” con el método de la asamblea y la democracia directa!

Los trotskistas no dudamos en decirle a la clase obrera chilena y de todo el continente que no tendrá salida sin pelear por derrotar la restauración capitalista en Cuba, enfrentando al castrismo que ayer traicionó la revolución de los Cordones Industriales y hoy está terminando de entregar al imperialismo el único estado obrero del continente y así impedir que hayan “nuevas Cubas” revolucionarias de Alaska a Tierra del Fuego, y en primer lugar en EE.UU., contra los piratas imperialistas. La clase obrera chilena debe derrotar al PC que está en el gobierno, y es la misma lucha por derrotar la restauración capitalista en Cuba. Así se pondrá de pie enfrentando el Pacto-contrarrevolucionario de Obama-Castro y los bolivarianos, sostenido por el Foro Social Mundial y las direcciones traidoras.  
Llamamos a los trabajadores chilenos a ponerse de pie junto a sus hermanos de clase que están siendo masacrados en Siria, donde el imperialismo ha concentrado sus fuerzas contra las masas revolucionarias para escarmentar al proletariado mundial para que éste no se subleve por sus demandas peleando con el método de la revolución socialista como lo hicieron las masas en 2011 en todo el Norte de África y Medio Oriente.
Peleamos por que sea la clase obrera chilena y su juventud los que encabecen la lucha por la libertad de todos los presos políticos del mundo, como los petroleros de Las Heras (Argentina), que son perseguidos y encarcelados por las mismas transnacionales que súper-explotan, hambrean y reprimen a la clase obrera y las masas explotadas de Chile y desangran los pueblos oprimidos con su voraz saqueo imperialista.

Este es el programa de la FLTI para combatir todos los días codo a codo junto a la vanguardia obrera y juvenil para pelear por poner en pie la dirección revolucionaria que la clase obrera necesita y se merece para triunfar, la IV Internacional de 1938 refundada contra el estalinismo y sus laderos de los renegados del trotskismo, agrupados en el Foro Social Mundial.