28/2/2014

Irak: ÚLTIMO MOMENTO

Un vergonzoso silencio por parte de la izquierda de Obama y las burocracias sindicales de todo el mundo sobre el heroico levantamiento de las masas sublevadas de Ramadi y Falujah.

¡Viva el levantamiento de las masas explotadas iraquíes!
¡Paremos la masacre sobre ellas!
¡Rompamos su aislamiento!
¡Hay que retomar el rumbo revolucionario de su lucha, en Iraq, Siria y toda la región y romper con el curso de acción y situación que le han impuesto sus direcciones!

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FALLUJAH (Irak): hoy una insurrección de masas expulsa al gobierno y a las fuerzas represivas, y toma el control de la ciudad

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Hace cerca de dos meses que las ciudades de Ramadi y Faluja (Iraq) fueron tomadas por las masas. Con enormes insurrecciones que sobrepasaron todo tipo de traba impuesta por sus direcciones de la burguesía sunita (quien previamente había impuesto la paz y rendición a cambio de un pacto con la burguesía shia y los yanquis para tener también una parte jugosa en sus negocios), derrotaron a las fuerzas del Estado Iraquí, personeras del imperialismo yanqui en el lugar. Derrotaron militarmente en las calles a la policía y el ejército y las expulsaron de esa ciudad. Tomaron todos los edificios públicos echando a los funcionarios y declarando que ya el estado iraquí no controlaba más la ciudad.
El estado iraquí, contando con el apoyo y el financiamiento de EEUU, no perdió ni un segundo en intentar retomar las ciudades por la fuerza. Pero les fue imposible. Sin importar cuánto armamento pesado de última tecnología que reciban de EE.UU., las masas en los combates casa a casa, defendiendo sus viviendas y sus familias, hasta ahora han podido repeler los intentos de las fuerzas iraquís-yanquis.

Desde dentro de sus levantamientos se montaron por encima, colocándose como sus jefes, los dirigentes de El Estado Islámico de Iraq y el Sham. Tomaron la dirección de los levantamientos y los transformaron en una guerra de resistencia frente los brutales ataques a la distancia que hace el ejército iraquí a cuenta de los norteamericanos, y en una negociación por detrás.

Es que los métodos del Estado Islámico de Iraq y el Sham no son el levantamiento de masas. No son sus métodos movilizar a las masas contra el régimen, insurreccionar a los oprimidos contra los opresores, llevarlos a derrotar sus instituciones para tomar la resolución de sus problemas en sus propias manos. Sus métodos son los de negociar una mayor parte de los negocios a su favor, utilizando y manipulando sectores de las masas y sus justas aspiraciones y lucha, inclusive llevando a cabo atentados individuales u operaciones aisladas. Por ello lo que sucedió en Iraq y viene sucediendo desde el inicio del año 2014 es una fenomenal insurrección de masas, sobre la que se montó el Estado Islámico de Iraq y el Sham. Para nada fue ni es una guerra entre las fuerzas del régimen Iraquí y las del Estado Islámico de Iraq y el Sham. Son las fuerzas de la revolución en el Norte de África y Medio Oriente, que pudieron –en un par de ciudades- salirse del control de sus direcciones y derrotar los planes contrarrevolucionarios que se imponían contra ellas.

Los levantamientos de Faluja y Ramadi fueron y son la lucha revolucionaria de las masas en toda la región. El Estado Islámico de Iraq y el Sham logró, desde adentro, controlarlas. Las aisló. Las reemplazó por el método de guerra de territorios militar para expandirse de ciudad en ciudad. Reemplazó el método del levantamiento de masas contra el régimen por un par de operaciones aisladas y autos explosivos aislados, que sólo causan y causaron la desmovilización. Reemplazó la toma de edificios del régimen y la expulsión de todos su funcionarios y sus fuerzas de represión por sentarse junto con ellas a negociar. Y sobre todo, reemplazó la lucha común contra Ginebra II y todos los planes contrarrevolucionarios y los regímenes burgueses sirvientes del imperialismo en la región por la división entre Iraq y Siria, actuando con sus métodos en el primero, robándose el nombre y la lucha de las masas de Faluja, y haciéndose odiar actuando como quinta columna en el segundo.

Pero las masas de Faluja y Ramadi no han sido derrotadas. Están aisladas sufriendo el terrible bombardeo del ejército iraquí a cuenta del imperialismo yanqui. El accionar de su dirección le impide desarrollar su lucha como tal en Iraq y en Siria. Hay que romper su aislamiento. Por eso hay que desarrollar los métodos de lucha de las masas, sobrepasando las acciones de las direcciones que quieren manipular su lucha para sus negocios. Hay que volver a ganar las calles en el resto de las ciudades que se levantaron junto con Faluja y Ramadi y su movimiento fuera desviado y reprimido. Hay que volver a empuñar las armas para, con los métodos de las milicias obreras y campesinas –no de las brigadas del ejercito del Estado Islámico de Iraq y el Sham- enfrentar la represión de las fuerzas del ejercito iraquí a cuenta del yaqui. Hay que volver a las movilizaciones de masas en el centro de Bagdad para volver a golpear el corazón del régimen. Hay que marchar en todos los países en solidaridad con las masas iraquíes masacradas. Faluja y Ramadi no son ciudades habitadas en un 100% por las fuerzas de El Estado Islámico de Iraq y el Sham. Son masas explotadas iraquíes que se levantaron contra sus opresores.

Este seria un gran empujón para las masas explotadas de toda la región –sobre todo sirias- a seguir el camino opuesto al de sus direcciones y enfrentar Ginebra II y los planes contrarrevolucionarios.

Brigada Leon Sedov