02/04/2014

VENEZUELA: Un debate con las corrientes que se reivindican del socialismo

Carta de Juan Córdoba y Florencia Barcaz, del Consejo Editor de la Editorial Rudolph Klement a la Corriente Socialista Revolucionaria – El Topo Obrero

Compañeros de la Corriente Socialista Revolucionaria – El Topo Obrero:

Somos una comisión del Consejo Editor de la Editorial Rudolph Klement, que ha sacado trabajos que ustedes conocen como sobre la cuestión china, la revolución boliviana, las Tesis del ‘89, etc. Estamos trabajando la publicación de un libro de Venezuela, que contendrá todos los materiales que escribió nuestra corriente internacional durante años en los que el chavismo lleva estrangulando la revolución venezolana.

Ustedes conocerán y habrán visto en nuestra página web la última declaración de la FLTI sobre el momento actual de Venezuela y también las posiciones de nuestros camaradas de la LCT de vuestro país.

Para nosotros es muy importante la pelea que distintas corrientes de la izquierda venezolana vienen dando para marcarle un camino no sólo al proletariado de Venezuela sino de todo América Latina.
El ocaso del chavismo y el futuro de la clase obrera venezolana, hacen al futuro de la clase obrera latinoamericana como mínimo.

Venimos siguiendo con mucha atención las distintas declaraciones con las que ustedes vienen preparando e intervinieron en el “Encuentro Sindical y Popular” realizado el pasado 21/03, convocado por la C-Cura y otras organizaciones obreras de Venezuela.

El objetivo de esta carta es realizarles algunas preguntas o plantearles inquietudes que tenemos sobre vuestras posiciones, con el fin de que nos las aclaren, para poder comprender mejor el carácter de vuestra lucha actual.

Para nosotros, que como les dijimos estamos trabajando en un libro sobre Venezuela (que esperemos que sea publicado en Julio), es importante si ustedes pueden responder a estas inquietudes que aquí les enviamos. No queremos abrir una polémica sin conocer ciertamente y en profundidad cuestiones de vuestra política que no comprendemos; que es más, en determinadas cuestiones vemos como contradictorias. Por ello, les formularemos algunas preguntas que ustedes evaluarán si las responden o no. Esto nos ayudará a nosotros a comprender mejor la ubicación de la izquierda venezolana e internacional sobre los acontecimientos de Venezuela.

Hemos leído la declaración que ustedes firmaron con la RCIT con fecha 18/03/2014: “Venezuela: la crisis solo tiene una salida socialista revolucionaria impuesta por la clase obrera y bajo la dirección de un Partido Leninista de Combate
Asimismo, el 17/03 hay una nota firmada por ustedes con el PCO de Argentina titulada: “Venezuela: por una salida obrera a la crisis”.
También tenemos la carta que ustedes mandaron con el grupo Opción Obrera a dicho Encuentro, como además la última carta que le enviaron a la corriente “Marea Socialista”.

Vayamos al meollo de la cuestión y a las inquietudes y preguntas que tenemos:

En la declaración que firman junto a la RCIT, ustedes afirman en su punto 2:

Llamamos a todos los trabajadores y las organizaciones populares -incluyendo a las que están bajo la influencia del PSUV y el Polo Patriótico- para formar un frente único de lucha contra las provocaciones de la derecha y contra la violación de las libertades democráticas como el de expresión, organización y movilización de los sectores verdaderamente democráticos y revolucionarios.

Ustedes aquí llaman al PSUV y al Polo Patriótico que están en el gobierno con Maduro comandando el ataque a las masas, a cuenta del FMI y el imperialismo. Están llamado a un gobierno y a un partido burgués a hacer un frente único, no se sabe si democrático u obrero, para derrotar a la derecha y el ataque a las libertades democráticas. Lo hacen con el gobierno que no se ha cansado de reprimir las luchas de los trabajadores y de detener a luchadores obreros en sus cárceles.

Más abajo, a renglón seguido plantean:

Al mismo tiempo, los socialistas señalamos el papel negativo que juegan las ilusiones en el gobierno de Maduro que está demostrando que su alianza es con los amos del capital –Fedecámaras, Consecomercio, Fedeindustria, Fedenaga-. También rechazamos cualquier orientación reformista de delegar la tarea de derrotar a la derecha fascista, a la policía y el ejército bolivariano.

¿Ustedes llaman a hacer un frente único con el gobierno, que se apoya en la Fedecámaras, para derrotar las provocaciones de la derecha? Si ustedes llaman a un frente único al PSUV y al Polo Patriótico, que son el gobierno de Maduro, están delegando en un frente único con el gobierno la tarea de derrotar a la “derecha fascista”.
Aquí ustedes plantean que el gobierno “bolivariano” está con Fedecámaras y toda la patronal y el imperialismo de Venezuela. No entendemos. ¿La patronal, el imperialismo y la Fedecámaras, están con Maduro sosteniéndolo, o preparándole un golpe fascista para ya derrocarlo? Vemos una contradicción allí o no entendemos hasta el final lo que ustedes dicen. No queremos pre-juzgar ni polemizar; queremos plantearles si nos explican esto.
Si la burguesía y el imperialismo ya están organizando un golpe fascista, entonces la política central que organiza todo el programa es “aplastemos el golpe fascista”, milicias obreras, frente único obrero,  es decir defendemos a un régimen superior (libertades democráticas) contra un régimen inferior de dominio, al decir de Lenin, con los métodos de la revolución proletaria. Esta sería una política clásica para enfrentar a los golpes bonapartistas y fascistas.
La verdad es que no entendemos sus afirmaciones. Las vemos completamente contradictorias y la política que surge de las mismas, como un “frente” contra la “derecha” con el gobierno de Maduro que se la pasa reprimiendo y encarcelando trabajadores, nos parece realmente una enorme confusión.

En otras declaraciones ustedes plantean que el peligro inmediato no es el del golpe. Así lo afirman en la declaración con el PCO:

…por lo tanto no hay ningún sector significativo de la burguesía local, ni del imperialismo yanqui que esté interesado hoy en día en un golpe de estado, tanto que hasta el propio secretario de estado de EE.UU, John Kerry,  declaraba en días pasados que las relaciones con Venezuela debían cambiar pues ya llevaban mucho tiempo tensas.

O sea, que para ustedes, el imperialismo no está organizando un golpe fascista, sino que está sosteniendo a Maduro. Y todos sabemos, como planteaba Trotsky, que en un país semicolonial, es el imperialismo el que organiza toda sedición fascista o bonapartista.
Maduro es el que está atacando a la clase obrera y las masas y redoblando la entrega de Venezuela al imperialismo. Entonces, ¿el enemigo central es Maduro o las guarimbas a las que hay que derrotar antes (suspendiendo la lucha contra el gobierno) para después poder enfrentar a Maduro y Kerry?

Por eso, inclusive, no entendemos por qué si en la declaración con la RCIT firmaron que Fedecámaras estaba con Maduro sosteniéndolo, en la nota con el PCO de Argentina, justo en el párrafo anterior a nuestra última cita, plantean que es Capriles quien representa a Fedecámaras. Veamos lo que dicen:

La colosal pirotecnia verbal desplegada por Maduro pretende ocultar que su gobierno está integrado y sostenido por las FFAA la cual hasta ahora no ha mostrado ninguna disidencia con el mismo, y que la aguda crisis económica que atraviesa el país, ha llevado al gobierno a  un acuerdo con el sector mayoritario de la MUD (Mesa de Unidad Democrática) opositora electoral del chavismo, liderada por Capriles Radonsky, que representa políticamente a los sectores burgueses opositores al chavismo, y directamente con la burguesía que lo confronta representada por Fedecámaras, Fedeganaderos y Consecomercio…”

Aquí esbozan una denuncia de que hay un pacto de Maduro con Capriles, pero Fedecámaras aquí es representada por Capriles. No van hasta el final. Fedecámaras están con los dos. Ambos son agentes distintos del mismo jefe. Uno es Maduro, el que hoy aplica el plan (que inclusive lo venía haciendo sostenido por Capriles), mientras se prepara una “derecha aguerrida” en las calles para llevar hasta el final el plan de Maduro si éste fracasa. Aquí ustedes son totalmente contradictorios. Ustedes tendrían que definir con total claridad el carácter de clase de estas fracciones burguesas y a qué sectores de clase éstas responden. No se puede jugar a las escondidas con esta cuestión.
En segundo lugar, ustedes deberían clarificar si el que concentra el ataque del imperialismo contra las masas es el gobierno o no.
¿Ustedes creen que este plan de Maduro de saqueo, hambre, miseria, desocupación, devaluación y carestía de la vida, se impone hasta el final sin las FF.AA. “bolivarianas” en las calles aplastando a las masas?

Pero como vemos, ustedes siguen insistiendo en que el corazón del estado, es decir, las FF.AA., junto con Kerry, apoyan a Maduro para que termine de pasarle el ataque a las masas. Las FF.AA. no serán neutrales. Aún resta pasar el aumento del precio de la gasolina. Maduro exige el apoyo de Capriles y la “oposición” para comandar él el ataque a las masas. Las fuerzas reaccionarias oligárquicas de la MUD le exigen al gobierno que sea él quien se incendie y ataque a su propia base social, a las masas, para sacar a la Venezuela capitalista hundida en el pantano del crac sometiéndola con dobles y triples cadenas al imperialismo.

Estas son distintas posiciones que ustedes plantean de forma contradictoria en todos los documentos que fueron editando con distintas corrientes, que nos parece sería importante que vuelvan a leer. No estamos inventando nada. Podríamos plantearles 20 citas contradictorias sobre esta cuestión, extractadas de los distintos documentos que ustedes publicaron.

Las FF.AA. y su casta de oficiales, que -al decir del marxismo- representan los intereses de toda la burguesía y de todas sus fracciones, hoy sostienen a Maduro junto con Kerry, para que terminen de derrotar a las masas hasta el final y si éstas se sublevan, masacrarlas como en el Caracazo. ¿Sino qué significa el apoyo de las FF.AA. y de Kerry a Maduro? Es para que haga esta tarea.
Mientras sucede esto -que es lo que plantea la LCT de Venezuela correctamente-, la “derecha” venezolana se prepara por si Maduro fracasa con este plan, inclusive obligándolo a ir hasta el final. Si este gobierno fracasa en pasar su ataque contra las masas, en aumentar los precios de la gasolina y en ir hasta el final con la entrega de Venezuela al saqueo imperialista, estos oligarcas lo harán con un movimiento proto-fascista para aplastar a los explotados.
Maduro pide diálogo. Llama a la OEA, a la UNASUR, a la CELAC. No quiere incinerarse solo a lo bonzo atacando a las masas. Es más, necesita el apoyo de la “oposición” burguesa puesto que el imperialismo también tiene que atacar duramente a las clases medias.

Viendo vuestros documentos, ustedes llaman a derrotar a las guarimbas. ¿Y a Maduro no hay que derrotarlo? ¿Por qué no llaman a derrotar a la casta de oficiales de ese ejército asesino del Caracazo? Quizás haya declaraciones de ustedes que no conocemos. Pero si Maduro es el que concentra el ataque del imperialismo, la clave es que si el movimiento obrero irrumpe con la Huelga General contra él, va a atacar al corazón del plan del imperialismo y del FMI.
El llamado a romper la base del ejército, a poner en pie comités de soldados, ganados por los obreros, sus organizaciones de lucha y sus milicias, es clave para derrotar el plan de Maduro y el imperialismo, que es el que está atacando hoy a las masas, sostenido por las FF.AA. “bolivarianas”.
Ustedes plantean que no hay que darle ningún apoyo político al “gobierno burgués” de Maduro y que hay que aplastar a la guarimba. Pero, ¿hay que derrotar a Maduro o no? ¿Hay que derrotar el ataque del gobierno chavista, del PSUV y del Polo Patriótico, sostenido por el FMI, Fedecámaras y la casta de oficiales asesina del Caracazo? ¿Sí o no?
Aún la guarimba no puede meter presos a los obreros ni aplicar la Ley Anti-huelga en cada lucha. Es el gobierno de Maduro el encargado de hacer esto.

Ustedes llaman a “derrotar las provocaciones semi-fascistas con el pueblo organizado en brigadas de orden y autodefensa”, ¿y a la casta de oficiales que sostiene al gobierno de Maduro no? ¿A esta casta que es la que encarcela a los obreros, reprime cuanta lucha hay y prohíbe el derecho a huelga no? ¿Ustedes qué creen que pasaría si los obreros se arman y organizan “brigadas de orden y autodefensa” para atacar a las guarimbas? ¿Qué creen que harían la casta de oficiales “bolivariana”?
¿Para ustedes el primer enemigo que hay que derrotar es la guarimba y no el gobierno de Maduro y su plan de ataque actual?
Esa es la contradicción que recorren todos vuestros documentos firmados con distintas corrientes y hacia el Encuentro Sindical.
Les aclaramos que ni bien a los obreros se les ocurra hacer “brigadas de orden” y milicias obreras para defenderse de los proto-fascistas chavistas, sicarios del gran capital, que atacan sus huelgas; enfrentar la represión de las policías de Maduro y de Capriles; y derrotar a las guarimbas como ustedes dicen… la casta de oficiales actuará como en el Caracazo, poniendo a las FF.AA. en las calles para asesinar a los obreros. ¿Por qué la izquierda venezolana no habla claro y dice esto con claridad?
Estas FF.AA. golpistas del 2002 son las que sostuvieron a Chávez en 2008 para que se abrace en la UNASUR con el asesino de Uribe, sobre la sangre y la entrega de la resistencia colombiana. Todo para que la burguesía venezolana y colombiana, bajo las órdenes de la Chiquita Brand y del FMI, pudieran hacer jugosos negocios bajo el comando de las 5 bases militares yanquis que hay en Colombia.
¿Por qué no hablan claro? Las guarimbas hace un mes y medio que levantaron cabeza. En este tiempo hubo 20 muertos… mientras que en el Caracazo del ’89, en tan sólo dos días las FF.AA. masacraron a 5.000 explotados.

La política de Maduro es llamar al diálogo a la guarimba para atacar todos juntos a las masas. No entendemos que visión tienen ustedes. ¿O el de Maduro es un gobierno “progresista” y “democrático”?

La Huelga General que ustedes llaman, ¿contra quién es? ¿Es para derrotar al gobierno de Maduro? ¿Es para demostrar quién es el verdadero dueño “de la casa”, si Fedecámaras, Maduro, Kerry, la casta de oficiales asesina o la clase obrera que los enfrenta? Ustedes dirán que eso es peligroso, que se agrandaría la derecha fascista. Pero hay un problema. Aquí la “derecha fascista” se agranda porque la clase obrera, a través de la burocracia de la UNT, está sometida a Maduro.
Más y más la clase obrera es sometida al frente popular (PSUV-Polo Democrático), y más y más levanta cabeza el fascismo. Es que el frente popular está para desorganizar a las masas para que luego venga el fascismo o el bonapartismo y las aplaste, ya sea desde la casta de oficiales del ejército o desde las guarimbas.
Si la Huelga General es contra Maduro, las milicias obreras son para garantizarla, para quebrar a la casta de oficiales del ejército masacrador del Caracazo y poner en pie comités de soldados. ¿Esto significaría o no derrotar al plan del FMI y Kerry?
¿No les parece que si esto pasa en Venezuela, las guarimbas durarían dos segundos y se apagarían al primer minuto de una Huelga General Revolucionaria contra el FMI, el gobierno de Maduro y la “boliburguesía” millonaria? Inmediatamente en su combate contra Maduro, la clase obrera dividiría rápidamente a las clases  medias, como veremos luego. Partiría a la guarimba. Es que a las clases medias no se les gana diciendo “que los estudiantes vengan a apoyar la lucha contra el FMI”, como ustedes afirman. A las clases medias se las rompe y el proletariado se gana a su sector más empobrecido, en las calles, atacando a la propiedad de los capitalistas y dándoles lo que el gran capital les expropia. De eso se trata la alianza obrera y popular.

Pero sin embargo ustedes plantean un “frente democrático” con la burguesía, que es Maduro, contra la guarimba. Si ustedes llaman a Maduro a un “frente democrático”, ¿cómo van a llamar a la Huelga General contra Maduro?
No entendemos. ¿A qué Huelga General llaman? ¿Llaman a una Huelga General donde participe el PSUV y el gobierno de Maduro para aplastar a la guarimba? ¿Esa es la Huelga general que ustedes llaman? Aquí han hecho una confusión.
Está claro que quien ataca a las masas hoy es Maduro, sostenido en Kerry y el FMI, tal cual afirman ustedes mismos. El gobierno de Maduro entonces es el enemigo central. Como ya dijimos, luchando contra él, las milicias obreras y la Huelga General aplastarían a las guarimbas porque una irrupción generalizada del movimiento obrero contra Maduro, significaría que se levantaría una alternativa revolucionaria del proletariado frente a los López y las Machado, que dividiría de forma inmediata a las clases medias que mantienen el fuego de la guarimba. Le sacaría a estos oligarcas todo apoyo de los sectores de las clases medias desesperadas.
Es que sólo la clase obrera puede garantizar la expropiación sin pago y bajo control obrero de los bancos y las transnacionales para darle alimento barato y crédito barato inclusive a las clases medias arruinadas.

Para comprender por qué vuestra política de “frente democrático” con Maduro y el PSUV, nos tendrían que contestar si ustedes ven la posibilidad de un golpe militar inmediato, que por ahora utiliza a la guarimba, pero prepara un zarpazo golpista en cualquier momento.
Pero en otros documentos ustedes niegan que esto esté planteado. Entonces, lo que ustedes están llamando como política para la acción es aplastar a los fascistas de la guarimba y llamar… al paro general para presionar a Maduro para que no ataque ni imponga el plan del FMI. La política de ustedes hacia Maduro es de contención, no es para derrotarlo. Es para parar el ataque en general, no para derrotar a Maduro, ni al FMI, ni a Kerry que lo sostienen, ni a sus milicos genocidas, ni a Fedecámaras. Ustedes sólo llaman a derrotar a la guarimba.

Pero luego, en otras declaraciones, ustedes llaman a expropiar a la burguesía “chavista” y a la “anti-chavista”. De vuestros documentos no entendemos como se hace para hacer lo que ustedes proponen. ¿Cómo hacen para garantizar expropiar a la burguesía “chavista” y a la “anti-chavista”? ¿El movimiento obrero tiene que romper con los “chavistas”, con los “antichavistas”, expropiarlos a todos y hacer la Huelga General? ¿Contra quién? ¿Contra todos?
Insistimos, ustedes dicen que primero hay que aplastar a la guarimba y presionarlo a Maduro “sin darle a él ningún apoyo político”. Entonces el paro general no sería contra todos. Claro, si ustedes lo llaman a Maduro a hacer un “frente democrático” para derrotar a la guarimba…
No los comprendemos. No sabemos qué quieren decir. No sabemos a qué paro general llaman, contra quién y para resolver qué tareas inmediatas.

No comprendemos y quisiéramos que nos respondan por qué no tienen una política hacia el ejército “bolivariano” para poner en pie comités de soldados para derrotar a la casta de oficiales junto con la milicia obrera, cuestión que resolvería en dos segundos apagar el fuego de la guarimba derrotando a Maduro. ¿Ustedes defienden no tener una política hacia los soldados, cuando llaman a la clase obrera a tomar el poder y a expropiar a todas las transnacionales? Porque estamos de acuerdo que esto por “vía pacífica” ni soñando se puede lograr, y mucho menos sin derrotar al gobierno de Maduro, Kerry y el FMI con una lucha revolucionaria en las calles.
Pero “la derecha está en las calles”, dirán ustedes. Justamente, una Huelga General Revolucionaria contra el gobierno de Maduro hace que el proletariado, rompiendo con el PSUV -que ataca tanto a la clase obrera como a las clases medias-, se gane a las capas más arruinadas de estas últimas y pueda “apagar” a la guarimba, marchando al derrocamiento revolucionario de Maduro. Si el proletariado le deja a Machado el combate contra Maduro, y la izquierda y la UNT le siguen dando un apoyo vergonzante, el camino a que surja un golpe fascista o militar en el futuro, estará garantizado.
Hablemos claro: ¿la política inmediata para el proletariado es la derrota política del gobierno de Maduro, Kerry y sus FF.AA. asesinas? ¿Sí o no? Sin esto, para nosotros no hay derrota de la guarimba, como lo demuestra Siria, Libia, la experiencia del frente popular en Francia en los ’30 y la Guerra Civil Española: lo que garantiza el triunfo del fascismo es el sometimiento del proletariado a la burguesía en el frente popular o “democrático”.
Pero en Venezuela aún no se levantó “Franco”, tal como dicen ustedes que afirman que no hay aún un golpe militar o fascista. Les insistimos, lo que hay es un brutal ataque de Maduro contra las masas. Entonces la tarea central es derrotar ese ataque de Maduro y poner todas las fuerzas del proletariado para aplastar al FMI y a esa casta de oficiales asesina de las FF.AA. “bolivarianas”. Con comités de obreros y de soldados no quedarían ni rastros de la guarimba, a quien Maduro llama a dialogar.

Ustedes plantean la consigna genérica de “disolución del ejército permanente”. ¿Qué es esto? Nosotros planteamos la disolución de la policía, de las fuerzas de choque del estado burgués cotidianas contra las masas. Acá hay una cuestión grave. Nosotros no llamamos a disolver al ejército, sino a romperlo horizontalmente como hicieron las masas de Siria y de Libia cuando empezaron su revolución.
Los marxistas llamamos a derrotar y a destruir la casta de oficiales que es lo más rancio y concentrado del poder de los explotadores en el estado burgués, y a ganar a los hijos de los obreros y el pueblo bajo armas para la revolución.
Es más, este estado se reduce a esta banda de hombres armados. No llamar a poner en pie comités de soldados, es dejarlos a éstos bajo la disciplina de la casta de oficiales. Es renegar de antemano del camino a la revolución. No se entiende por qué levantan la consigna de “milicias obreras” si no es para romper la base del ejército. ¿O la tarea de estas milicias es disolver el ejército sin ganarse a la base de los soldados que maneja los tanques, los aviones de guerras, los cañones, la artillería? El marxismo ha discutido mucho contra las consignas híbridas como éstas.

Esa casta de oficiales “boliburguesa”, de la misma forma en que se sacó la chaqueta del Pacto del Punto Fijo para ponerse la chaqueta “chavista”, para luego darle a Chávez un golpe en el 2002 para después jurar fidelidad a la “Constitución Bolivariana”, mañana no dudará en ponerse nuevamente la chaqueta del golpe militar si Kerry da la orden.
El proletariado en Venezuela ha entrado en una carrera contrarreloj para poner en pie los comités de soldados. Es que las FF.AA. hoy son el sostén fundamental del estado burgués venezolano, mientras las pandillas burguesas están en una carrera de velocidad para ver quién aplica más fuerte y hasta el final el ataque contra las masas de Kerry y el FMI.
Maduro llora porque su amigo Capriles lo abandonó en “las mesas del diálogo”. López le dice: “atacá a las masas que te sacamos el jugo y después venimos nosotros”. El FMI siempre gana. ¿Y la izquierda?
Kerry tiene un plan de guerra que es mantener cohesionadas a las FF.AA. para volver a masacrar como en el Caracazo en caso de que Maduro fracase en su intento. Si esto pasa, las guarimbas irán detrás de los generales hasta hoy “bolivarianos”…

Vemos desconexiones y contradicciones en lo que ustedes plantean. A decir verdad, no entendemos vuestra política de aplastamiento de las guarimbas, de “frente democrático” con el PSUV, el Polo Patriótico y el gobierno para derrotar a las guarimba, y a la vez su llamado al paro general contra Maduro. No entendemos vuestra lucha por poner en pie milicias obreras sin llamar a derrotar a la casta de oficiales del ejército. No entendemos que levanten un programa para tomar el poder sin comités de soldados. Quizás estemos confundidos o interpretemos mal lo que ustedes escriben.
Quizás es nuestra visión equivocada de los acontecimientos de Venezuela lo que no nos permite comprenderlos a ustedes. Pero estamos dispuestos a que nos convenzan o nos expliquen y enseñen de vuestra posición.

Tampoco entendemos vuestro programa de nacionalizaciones del comercio exterior, del sistema bancario, etc. No entendemos por qué en todos vuestros documentos firmados con la RCIT, el PCO, con Opción Obrera, etc. no plantean que estas nacionalizaciones tienen que ser sin pago, como plantea el Programa de Transición trotskista.
Trotsky condenó duramente el programa nacionalista burgués de “nacionalización” que no aclara precisamente que deben ser sin pago. Justamente, la burguesía “nacionaliza” las empresas que dan pérdida con fuertes indemnizaciones para salvar al capital.
Por eso el Programa de Transición plantea que el programa de expropiación sin pago y bajo control obrero de la gran burguesía y los banqueros es opuesto a “la estúpida consigna reformista de nacionalización”. Por eso el Programa de Transición trotskista -alrededor del cual ustedes llaman a reagrupar fuerzas en Venezuela- plantea como condición: “1. Nos oponemos a las indemnizaciones”.
Obama nacionalizó parcialmente los bancos. Allende el cobre. Perón los ferrocarriles. Chávez muchas empresas como Sidor. Pero todos lo hicieron pagando indemnizaciones millonarias con la plata del pueblo. Todo para mantener “nacionalizadas” esas empresas, para luego devolvérselas saneadas a la burguesía.
Seguimos sin entender por qué tanto seguidismo al programa de nacionalizaciones del chavismo que fue la de salvar con la plata de las masas a la burguesía en bancarrota, tal como hizo Obama con los bancos de Wall Street, para luego devolvérselos sin deudas.
Seguramente se trata de un error de ustedes cuando transcribieron el Programa de Transición… No nos extraña que el PCO de Argentina se olvide la “expropiación sin pago” porque su programa es que las expropiaciones se hagan con leyes de las Legislaturas, fallos judiciales, etc. como es la política que aplican en la fábrica Zanón en Argentina, donde ya no queda casi nada de la conquista del “control obrero”, de la “nacionalización”, de “la expropiación sin pago”. Allí los obreros están por recibir un crédito para pagarle a todos los acreedores la deuda con su sangre, su sudor y su sacrificio. Esto pasa en Zanón, como pasó en Sidor. ¿Qué opinan de esto? ¿Están de acuerdo o en contra?
Por esto es que no nos llama la atención que el PCO, que acordó con el gobierno burgués de la provincia de Neuquén en Argentina una política de “nacionalización pagando indemnización”, levante en alto esa “estúpida consigna reformista de nacionalización”, como dice el Programa de Transición. Pero de ustedes nos sorprende. Quizás se les pasó.
Pero nos extraña ver que en Venezuela se plantee la política de nacionalización sin aclarar que deben ser sin pago, puesto que las indemnizaciones a la patronal en crisis han sido la característica de la burguesía “bolivariana” haciendo grandes negocios. Remitámonos al Programa de Transición.

Por supuesto, nosotros no somos neutrales en estas preguntas que les formulamos en esta carta. Tampoco somos simples observadores de sus posiciones. Nosotros somos la corriente que plantea que la UNT debe romper con el PSUV. Que todo “frente democrático” con el PSUV es atar al proletariado al cuello de su verdugo “democrático” que está sostenido asimismo por Kerry y la casta de oficiales de las FF.AA. “bolivarianas” asesinas.
Afirmamos que combatiendo por la Huelga General para derrotar al gobierno de Maduro, que es quien aplica el plan de Fedecámaras, Kerry y el FMI, el proletariado tendrá la autoridad y será una alternativa para todas las clases medias arruinadas, para aplastar a las guarimbas en su recorrido al Palacio de Miraflores.
La clase obrera venezolana está en una carrera contrarreloj. Más la someten a Maduro, más levanta cabeza la derecha, y más y más el FMI aplica su plan.

Saludamos vuestro combate por unir y coordinar a los que luchan, pero no vemos ningún programa por la democracia obrera y derrotar a la burocracia de la UNT, que es chavista, y contra las leyes del estado que someten a la UNT y la estatizan. Esto fue un grave problema que tuvo el Encuentro Sindical que realizó la izquierda venezolana. Quizás no estemos interiorizados con lo que pasó en dicho Encuentro por la debilidad de nuestro trabajo en Venezuela o por nuestra ignorancia, pero las demandas de “fuera el Ministerio de Trabajo de las organizaciones obreras”, de “terminar con sus laudos”, de “desconocimiento de todas las leyes que reglamentan la organización del movimiento obrero y la actividad sindical”, no fueron formuladas en ese Encuentro.
No entendemos por qué no está en vuestro programa y en vuestra moción al Encuentro la consigna de “abajo la burocracia de la UNT” y por “la ruptura de las organizaciones obreras con el PSUV y el estado”, en un país donde están totalmente estatizados los sindicatos y las organizaciones obreras. Y no sólo eso, sino que las masas han sido sometidas, tal cual esclavos, a limosnas de esas “misiones” que ya nadie puede ocultar que no han resuelto ningún problema de los explotados. Sólo han servido para encubrir y edulcorar, como hizo durante años toda la izquierda venezolana, a ese gorila anti-obrero “boliburgués” del gobierno de Chávez.

Éstas son nuestras inquietudes. Algunas son diferencias políticas, como estas últimas y vuestra posición sobre las nacionalizaciones con indemnización, como se refleja en la declaración que sacaron con el PCO, que insistimos plantea una chorrera de nacionalizaciones, negándose a plantear que sean sin pago.

Desde ya, esperamos que tomen esto como una crítica fraternal a vuestras posiciones y un pedido de aclaración de las mismas. Vuestra respuesta realmente es importante para nosotros. Como les dijimos, estamos haciendo un trabajo sobre el ascenso y el ocaso del chavismo, y estamos terminando su último capítulo. Vuestra respuesta tal vez nos haga cambiar muchas de nuestras posiciones quizás equivocadas, o bien nos reafirmará en nuestras convicciones. De todas maneras, todo debate fraternal entre corrientes marxistas, le sirve al proletariado internacional.

Una aclaración: no estamos discutiendo todas vuestras posiciones. En gran parte de ellas coincidimos. Se trata de pedir que nos ayuden en comprender las que no entendemos y también debatir en lo que no tenemos acuerdo. No nos engañamos: sabemos que aquí estamos debatiendo y pidiéndoles aclaración sobre uno de los grandes nudos que definen la política marxista hacia los acontecimientos de Venezuela. Y les insistimos, vemos una posición ecléctica en ustedes.

Conocemos la posición de la UIT-CI y de toda la izquierda pro-bolivariana que seguirá a Maduro hasta la muerte. Sabemos de la posición de la LIT que ve en ciernes una “revolución democrática” haciendo frente único con la guarimba. Todos tienen una posición en común: les falta un programa para derrotar a la casta de oficiales que sostiene a la “Constitución Bolivariana”, al estado burgués y a los intereses de todas las fracciones de la burguesía.
Ninguno tiene una política para que el proletariado, enfrentando a ese gobierno del hambre y la entrega que es el de Maduro, se alce como caudillo de todas las clases oprimidas de Venezuela para derrotar al imperialismo.
Ninguno de estos programas plantea una política para restablecer la alianza obrera y popular con un camino de ruptura con la burguesía. Ninguna posición llama a las organizaciones obreras a romper toda injerencia del estado burgués sobre ellas y las leyes que las reglamentan, sin lo cual es imposible la conquista de la democracia obrera en los sindicatos y organizaciones obreras.
Por eso ninguno llama a preparar un Caracazo triunfante, poniendo en pie los organismos de doble poder, los comités de obreros, de soldados, de consumidores, de desocupados y sus milicias. Se plantean miles de consignas por la “revolución venezolana” y ninguna plantea una estrategia soviética para la insurrección. Porque sin ella, ninguna de las tareas y programas que se presentan a los Congresos se pueden llevar a cabo, y mucho menos conquistar un “gobierno obrero y popular”. Pues todos sabemos que la Huelga General en sí misma plantea el problema del poder pero no lo resuelve.

Por último, el nudo que nos preocupa es lo que no está planteando en ninguna declaración que realizan sobre la cuestión venezolana, ya sea editada por ustedes, firmada con grupos y corrientes de otros países y ni hablar de su posición frente al Encuentro Sindical.
Vuestros documentos están impregnados de una visión nacionalista. Vuestro programa por el “socialismo” y el “gobierno de los trabajadores” es bien “venezolano”. Ustedes pintan a una Venezuela y al gobierno de Maduro, totalmente aislados en el planeta y es más, aislados de América Latina. Sobre esto quisiéramos que ustedes reflexionen.
El chavismo con el PSUV son fundadores y la dirección del Foro Social Mundial. Con los hermanos Castro entregan la resistencia colombiana al imperialismo. Eso no es menor para las masas de Venezuela, porque entre otras cosas, del triunfo de la revolución colombiana, depende que los obreros venezolanos coman o no. De eso se trata el ALBA, un mercado de sirvientes de las transnacionales, donde no sólo los Uribe/Santos de Colombia y los Ortega de Nicaragua aplican el plan del FMI, sino también lo hacen los Morales como en Bolivia, devenido en socio de la Banca Morgan hipotecando todos los hidrocarburos bolivianos.

Estamos sorprendidos por la ausencia de estas cuestiones en vuestra política. Es que la burguesía venezolana, junto al castrismo, sostenidos por el estalinismo y los renegados del trotskismo, entregaron todas las revoluciones que sacudieron a nuestro continente desde Alaska a Tierra del Fuego. Y una de sus grandes tareas fue que “nunca más haya una nueva Cuba” en América Latina y mucho menos en Venezuela… ni en Cuba.
¿Cómo se puede llamar a hacer un “gobierno de los trabajadores y el pueblo” y a “romper con el FMI” sin llamar a derrotar la política burguesa de la “Revolución Bolivariana” de los hermanos Castro y el FSM, los enterradores de la revolución latinoamericana, devenidos ahora en los más grandes lacayos de Wall Street?

Cuba acaba de sacar ya la Ley de Inversiones extranjeras en la isla. Los gusanos de esa nueva burguesía castrista preparan jugosos negocios. Estrangulando la revolución latinoamericana… la “derecha” se fortalece cada vez más en la guarimba. Venezuela le manda petróleo barato a Cuba para que los Castro entreguen la isla al imperialismo. Esa es una puñalada por la espalda a la lucha antiimperialista de las masas venezolanas.

Todo esto fue silenciado en el Encuentro Sindical del 21/04. La izquierda venezolana debe definirse.

Venezuela debe ser una nueva Cuba. Y para ello la clase obrera debe romper con ese partido de verdugos, lacayos del FMI y Wall Street, y de las bases militares yanquis en Colombia, que es el PSUV. Debe romper y llamar a la clase obrera de Centroamérica y el Caribe a derrotar la política que en Cuba y América Latina aplican los traidores del PC cubano, lacayos de Obama. Deben enfrentar el rol contrarrevolucionario de los pactos de la CELAC con el imperialismo yanqui, que impulsa su propia burguesía chavista contra la clase obrera y los pueblos oprimidos de América Latina.

El silencio sobre la CELAC, la restauración capitalista en Cuba, el ALBA, la “Revolución Bolivariana” como exportadora de la traición y estrangulamiento de toda la revolución de la clase obrera, los campesinos y las masas del continente americano, le quita validez marxista y cualidad revolucionaria a todo programa que intente dar respuesta desde un punto de vista de la revolución a la grave crisis que existe hoy en Venezuela.

En América Latina las fuerzas productivas han terminado totalmente imbricadas en distintos mercados regionales, del ALBA al MERCOSUR. Esto se expresa en relaciones políticas permanentes de todos los gobiernos de la región, como la UNASUR y la CELAC, todas bajo el mando de las transnacionales y del FMI. De ahí que todo intento de hacer pasar a una revolución en América Latina como “nacional” es rechazar de antemano el camino a la toma del poder por parte del proletariado.

No llamar derrotar al ALBA y a la restauración capitalista en Cuba, levantando el combate por los Estados Unidos Socialistas de Centroamérica, el Caribe y América del Sur, es negarse a pelear por un “gobierno de los trabajadores” en Venezuela.
No llamar a derrotar a esa cueva de bandidos traidores del FSM -donde está el gobierno de Maduro-, que son los grandes sostenedores de Wall Street, los que le salvaron sus ganancias derrotando la revolución en Grecia, en Siria, en Libia y toda la revolución latinoamericana, hasta el África martirizada, es negarse de antemano a luchar por la “revolución socialista en Venezuela”.
Sin luchar contra el castrismo, el exportador de la contrarrevolución (ahora ya abiertamente dentro de Cuba entregándola al capitalismo y al imperialismo mundial), no se podrá ni soñar con levantar un programa revolucionario en Venezuela.

Venezuela debe ser una nueva Cuba socialista, obrera, popular y campesina. Y para eso deberá derrotar al FSM y a los hermanos Castro que con el PSUV y su estafa de “Socialismo del Siglo XXI” se han convertido en los más grandes agentes directos del imperialismo en todo el sub-continente. Y no sólo eso. Cuando las masas norteamericanas rompían con Obama en las elecciones de medio término, los Castro y los Chávez dijeron: “nuestro candidato es Obama”, llamando al movimiento obrero latino y negro a apoyarlo. Con Castro, también fueron a Bolivia y a Argentina a estrangular los procesos revolucionarios, apoyando a los Morales y los Kirchner.

La izquierda latinoamericana vive un momento histórico. Si sigue sobre sus pasos, nuevamente llevará al proletariado a un callejón sin salida.
Que el PCO no enfrente abiertamente a la nueva burguesía castrista y se declare fiel seguidor de ella, no es ninguna novedad. Es que es un grupo neo-castrista, que hace rato rompió con el trotskismo.
Pero ustedes en esta cuestión fueron un ejemplo en Venezuela por su lucha internacionalista enfrentando a las “boliburguesías” en la cuestión de Libia y de Siria.
Los llamamos fraternalmente a profundizar ese camino, y a poner como primer punto de la agenda del programa de la clase obrera venezolana, el programa contra la restauración capitalista en Cuba. Fuera los hermanos Castro, entregadores del socialismo y traidores de la revolución latinoamericana. Basta de “Constituciones Bolivarianas”, sostenidas por la “oposición” gorila y las guarimbas, y por Maduro y las FF.AA. asesinas del ejército venezolano. Basta de ALBA, MERCOSUR y TLC. Fuera las bases yanquis de Colombia. Basta de “Socialismo del siglo XXI” que resultó ser lo peor del capitalismo del Siglo XX.
Venezuela y Cuba serán socialistas o serán colonia. Por una revolución que recupere el socialismo en Cuba, que lo logrará sólo como parte de un mismo combate por imponer una Venezuela de los consejos obreros y los comités de soldados. Por una Venezuela Obrera y Socialista, sin generales, patrones y banqueros imperialistas.
Sólo así Cuba y Venezuela serán un bastión de la revolución socialista en Colombia, Centro América, América Latina y todo el continente americano.

Ni Maduro ni la guarimba, que más tarde o más temprano, juntos llevarán a una masacre a la clase obrera y el pueblo venezolano. Que viva el Caracazo. Que viva la verdadera revolución socialista que será internacional o no será nada. Por los Estados Unidos Socialistas del Centro, Sur y Norte América.

El “Socialismo del siglo XXI” es hambre, miseria y saqueo del imperialismo. La izquierda, luego de haberle capitulado y haber sometido a la clase obrera al chavismo, como cuando desde la UNT llamaba a juntar 10 millones de votos en las urnas por Chávez, llorará por el “atraso” de los obreros venezolanos y su “crisis de conciencia”. Pero mientras haya un movimiento revolucionario que saque las lecciones de tantos combates y de tantas traiciones, no habrá oportunismo ni reformismo que pueda echarle la culpa a las masas de su servilismo ante la burguesía y el imperialismo.

Juan Córdoba y Florencia Barcaz,
Consejo Editor de la Editorial Rudolph Klement