4-08-2014

Las masas palestinas y del mundo resisten el genocidio del sionismo

Por dónde empezar. Tregua por siete horas, retirada de los tanques sionistas de las calles de Khuza’a, pueblo sureste de la franja, una de las zonas más atacadas. Miles de muertos, ciudades hechas ruinas, condiciones de hacinamiento y crisis sanitaria. Los hechos: las masas de Gaza, cercada por tierra, mar y aire, no tienen ningún lugar seguro frente al ataque.
Podríamos estar horas contando el accionar del sionismo, ni que hablar como las burguesías árabes o islamistas que se dicen anti-sionistas o anti imperialista  se han dedicado a darle la espalda a las masas Palestinas. Y otras varias horas sobre los discursos y la política de la ONU y de las potencias imperialistas para imponer los “dos estados” y la “paz de los cementerios” con el fin de dejar confinados en campos a cielo abierto a Gaza y Cisjordania y terminar de aplastar la lucha por la nación palestina, aunque ahora algunos países como España dicen que no le venderán mas armas.
Podríamos, hoy, contar algunas de las historias de quienes realmente sufrieron la masacre. Como por ejemplo un obrero de la ciudad sureña Khuza’a, quien va a utilizar la pequeña tregua para inspeccionar su casa por primera vez en dos semanas. En su dormitorio encontró un pesado proyectil de artillería que había entrado por el techo y sigue sin estallar sobre el suelo de baldosas. Junto a las ventanas de su piso, en la segunda planta, se amontonan casquillos de armas automáticas. Las fuerzas de ocupación que entraron en su casa “la han destrozado”, y uno la ve y se pregunta dónde demonios él y su familia vivirán. Cuenta “Abrieron los cajones, vaciaron el frigorífico y se apostaron en posiciones de combate”. Desde la azotea se ve el minarete de la mezquita del pueblo casi desmochado por dos proyectiles. Un vecino aseguró que “fueron disparos de despedida”.
O también la historia de otro joven de 20 años que estaba en el refugio de Rafah, de 20 años, aún dentro de la escuela cuando explotó el proyectil que mató a varias personas a las 10.45. Él también quería salir a comprar “galletas y bizcochos” para su familia, pero la metralla lo alcanzó en el hombro y en las dos piernas. A mediodía se sentaba a la sombra del piso de la Clínica Kuwaití de Gaza por falta de camas. Hablaba bajo, apretando los dientes, con la camiseta ensangrentada y agujereada por la metralla. El alto el fuego del viernes le había hecho creer “que podría regresar a casa” al este de Rafah, tras 15 días en el refugio. Llegó a las siete y media. La encontró destruida y se puso a “arreglar lo que podía”, hasta que “empezaron los bombardeos, muy poco después de las ocho”. Volvió a la escuela, donde lo bombardearon el domingo.
Testimonios como este o como el que contaba dos jóvenes mientras baldean los charcos de sangre la entrada de uno de los refugios explicaba que uno de ellos estaba con uno de sus amigos sentado fuera del refugio “Era lo común”, cuenta, “algunos de los niños estaban comprando caramelos y ese tipo de cosas. De repente hubo una explosión que a su amigo le golpeo, por eso lo llevaron a ese hospital”. Hoy su amigo ya no está.
Pero hoy, quiero resaltar y remarcar el mensaje que una doctora, mientras que corre entre la sala de cirugía y la guardia, y llegan los miles de heridos, que demuestra la resistencia y lucha del pueblo palestino: “ya les he contado sobre el sexto niño anónimo y el único que sobrevivió... nosotros en Gaza tenemos muchas historias y testimonios para contar al mundo sobre crímenes de guerra mientras que estamos sujetos a los más brutales ataques de parte del ejercito israelí… no somos víctimas tenemos nuestro derecho inalienable a una nación… no somos un caso de caridad a pesar de del dolor, horror agonía y destrucción.. algún día la justicia ganará.”
El mensaje de lucha de esta doctora no es el único, hay cientos de testimonios que cuentan, como este palestino de la ciudad de la ciudad de Khuza’a que cuenta que mientras la ciudad era evacuada, protegiendo a los niños y a las mujeres, la mayoría de los palestinos hombres se quedaron resistiendo, como es el caso de su hijo de 26 años “Ellos se quedaron dentro de las casas y atacaron a las fuerzas. Mi hijo estaba casado, tenía una hija estaba desocupado. Todos los hombres que se quedaron se conocían uno al otro eran del pueblo” y luego dice “por supuesto que estoy orgulloso de mi hijo.”
Las masas palestinas no se rinden y pelean, ellas resisten tanto en la Gaza martirizada como en Cisjordania, en las mazmorras del sionismo, ellas están de pie. De Gaza a Cisjordania y Jerusalén, desde la diáspora de Jordania y el Líbano es necesario poner de pie a la nación palestina para derrotar al estado de ocupación sionista. Las masas palestinas han comenzado choques con los puestos de control y la policía asesina sionista que cerca el ghetto de Cisjordania. Ese es el camino: ¡Huelga revolucionaria! ¡Armamento generalizado del pueblo palestino en toda su nación ocupada! ¡Por una nueva Intifada de Gaza a Cisjordania, de Nablus a Belén y Jerusalén para derrotar el invasor sionista. ¡Hay que pasar de la resistencia a la revolución! ¡Todas las armas de Hamas y Al Fatah para armar a todo el pueblo palestino! ¡Por comités de organización de guerra! ¡Milicias obreras y populares ya!
De pie las masas de la región, de Túnez a Jerusalén para derrotar el estado fascista sionista de Israel. ¡Es una misma lucha! Ayer en Homs, Damasco, Túnez y la Plaza Taharir de El Cairo, hoy en Yemen, Marruecos y Gaza, una sola revolución de obreros y campesinos contra el imperialismo invasor de Irak y Afganistán, contra las burguesías nacionales millonarias socias menores del imperialismo en toda la región. ¡Hay que disparar el misil más poderosos que tenemos los explotados en Medio Oriente! ¡Hay que expropiar sin pago a los saqueadores de los pueblos oprimidos las petroleras, los bancos y las transnacionales! ¡Fuera esa cueva de bandidos de los piratas imperialistas de la ONU, que viene a imponer la rendición, como ayer lo hizo en Damasco, el Líbano y toda la región! ¡Abajo el plan de los “dos estados” para confiscar a las masas palestinas en verdaderos guetos! ¡Abajo el Apartheid que quieren imponer el sionismo, los bandidos imperialistas y la ONU! ¡Por una Palestina libre, laica, democrática y no racista, desde el río Jordán al mar, con capital en Jerusalén!
Las masas palestinas tienen un  aliado que son los explotados del mundo entero, en las metrópolis, que se han puesto de pie.  Vimos las acciones en el estadio de futbol de Chile, vimos las marchas en ciudades como Los Ángeles, Nueva York, acciones en los puertos de Oakland y frente a la quinta de Kerry. Marchas de la juventud en Londres y Paris, todos al grito de “Paremos la masacre” “¡Rompamos el cerco a Gaza! ¡Israel genocida, financiado por Estados Unidos, Holande!La clase obrera mundial y la juventud, ante cada ataque del sionismo, esta ha respondió ganando las calles y poniéndole un freno al accionar del sionismo.
Peleemos por: Paremos la masacre de Netanyahu y Obama ¡Aplastemos al sionismo!: Son criminales de guerra. ¡Guerra total para derrotar al ejército de ocupación!
¡Paremos los puertos en todo el mundo! ¡No se embarcan naves que llevan pertrechos militares y mercadería a Israel! ¡Los trabajadores del mundo sólo embarcamos alimentos, medicamentos, armas y pertrechos para la Palestina martirizada! ¡Hay que parar el brazo asesino del sionismo, armado por la City de Londres, el Bundesbank, los bancos de París y Wall Street!
                                                                                                                   
¡Por una jornada internacional de lucha con marchas, huelgas generales en toda Europa, parando los puertos para parar la masacre y levantar el cerco a Gaza!
¡Por una intifada/levantamiento internacional para parar la masacre al pueblo de Gaza y terminar con el siniestro plan de confinar en guetos la nación palestina! ¡Por comités de apoyo y brigadas de todas las organizaciones obreras y anti-imperialista del Norte de África, Medio Oriente y el mundo para romper el cerco a Gaza e impedir una nueva masacre!