“… No tienen baño como la gente, no tienen un lugar para sentarse a tomar un mate…”
“… Los hacían trabajar 16 horas… muchos chicos que vivían lejos se quedaban a dormir en cualquier micro 3 o 4 horas y arrancaban de vuelta…”
Las esposas, novias, madres, hermanas y toda la familia de los choferes de la Este y la 520 están al pie del cañón defendiendo el trabajo de sus maridos, que es el pan de sus hijos. Ellas son el sostén para que esta durísima lucha pueda seguir adelante. Dialogamos con algunas de ellas para que nos cuenten su situación y cómo la están viviendo:
PMT: ¿Contanos quién sos, por qué estás acá, qué es lo que están reclamando?
R: Bueno, yo soy R, soy la señora de un chofer y mi hijo es chofer también, y estamos acá porque los estamos apoyando en todo y bueno, para darle apoyo a mi marido y a mi hijo que lo necesitan mucho en este momento.
PMT: ¿Qué es lo que ellos están reclamando? ¿Cómo empezó el conflicto?
R: Bueno todo empezó porque empezaron a suspender a muchísima gente, en un mes hubo más de 80 chicos suspendidos, pero por cualquier motivo y segundo, el límite llegó cuando hubo 17 despedidos, y después 5 fueron mandaron telegrama que querían abrir las urnas para elegir delegados y no pasó ni un día que fueron echados.
PMT: Ellos están intentando elegir delegados democráticamente en su lugar de trabajo, y no que se los ponga la UTA…
R: Exactamente, es así. Desde el 2001 que no se eligen delegados por urna. Los señalan los del sindicato, la UTA. Y ellos cuando hicieron el traspaso en marzo (de la línea a manos de Corbelli, NDR) directamente se quedaron sin nada, ni siquiera un delegado señalado por la UTA, ni el sindicato, nada, nada.
PMT: O sea, no tienen ninguna representación…
R: Por eso estaban ellos totalmente desamparados, nadie los protegía. Podían hacer con ellos lo que querían porque no tenían a nadie que los defendiera. Pero eso sí, todos los meses nos sacaban del bolsillo los del sindicato, nos cobraban, nos sacaban, todos los meses igual eso. Pero cuando tenían que defenderlos no, ahí no existía nadie como en estos momentos nos está pasando…
PMT: Eso te iba a preguntar… ¿Dónde está la UTA ahora?
R: Nada, desaparecieron. No, no sólo desaparecieron, los tenemos en contra. Han ensuciado a los trabajadores pero terriblemente, las cosas que han inventado… Que para mí lo hacen para decir “no los defendemos por esto”. Pero después cuando se tranquilice todo esto lo vamos a estudiar, qué es lo que vamos a hacer con todas las injurias que han inventado contra los trabajadores.
PMT: Desde el sindicato que tendrían que estar defendiéndolos, se sientan con los empresarios, se sientan con el intendente… con el empresario que maneja el 80% del transporte en la ciudad…
R: Sí, el 83% o el 85%, es el empresario que maneja todo esto acá. Sí, se sienta con ellos. Con los trabajadores en ningún momento se sentó a charlar. Al contrario, todo en contra.
PMT: Y nos contaban de las terribles condiciones de trabajo…
R: Sí, mi marido por ejemplo trabaja justo en la parte de la terminal, ahí no tienen baño. Yo creo que ahí en ruta 11 (donde está la terminal, NdR) yo creo que un perro entra y se va, por la mugre, el olor, lo sucio que estaba. No tienen baño como la gente, no tienen un lugar para sentarse a tomar un mate, no tienen. El chofer llega, se queda parado; va al fondo del terreno, del predio, porque al baño no van. Esas son las condiciones. En las mismas condiciones que está el baño, en las mismas condiciones trataban al obrero, al trabajador, o sea, una porquería. Los hacían trabajar 16 horas a los muchachos nuevos. ¿Qué hacían? Te suspendía por cualquier cosa. 3, 4 días. Eso que te quitaban a vos, la mitad iba a parar a esos muchachos. O sea, vos trabajabas 8 horas en blanco, las 8 horas eran extras, pero si a un obrero le pagan 1200 o 1400 , a los chicos nuevos le pagaban 600, la mitad, y más vale que aceptaras, porque sino esos chicos eran o suspendidos o echados. Entonces los chicos por no perder el trabajo, aceptaban. Y muchos chicos que vivían lejos se quedaban a dormir en cualquier micro 3 o 4 horas y arrancaban de vuelta. Así, en esas condiciones…
PMT: En esas condiciones viajaban los trabajadores porque somos nosotros, los trabajadores los que usamos el transporte público.
R: Exacto. Yo creo que muchas veces el pasajero que se queja que el chofer está de malhumor, no tiene ni idea en qué condiciones está trabajando ese chofer… No solamente con falta de descanso. Sino también en el estado en que están los micros. Los micros no tienen ruedas, no tienen frenos, el motor hace un ruido impresionante y ellos tienen que trabajar 8, 10, 12 horas escuchando ese ruido… Una cosa increíble.
PMT: Estamos volviendo a condiciones laborales como hace dos siglos atrás… previo a conquistarse las 8 horas de trabajo…
R: Exactamente. Yo los vi sufrir a mi hijo y a mi marido, lo ví venir mal, totalmente incómodos, sentirse mal. Es increíble lo que les pasó. Y la fuerza que ahora tienen que tener para poder salir delante de todo esto porque les ponen trabas…
PMT: Amenazas… Nos contaron que hoy los llamaron diciéndoles que se tenían que presentar porque sino iban a perder su trabajo…
R: Así es y por lo que me enteré, en los micros que están saliendo supuestamente hay dos choferes y un policía. No, por lo que me enteré son patoteros de la UTA que van controlando que el chofer que fue exigido a manejar cobre boleto, haga todas las cosas y no se le ocurra bajarse del micro. Eso es lo que cuenta una mujer que le pasa a su marido.
PMT: Y acá hemos visto a madres, esposas, hermanas, toda la familia apoyando a los choferes…
R: Más que nada lo que nos organizamos fue que todas, un grupo hermoso se ha hecho para apoyar a nuestros hijos, esposos, novios y así estamos tratando también de darle fuerza a ellos, porque lo necesitan, porque están luchando mucho. ¿Quién no pensaba que Garro iba a intervenir? ¿Quién pensaba que Vidal los iba a mandar a reprimir de la forma en que lo hizo? ¿Quién iba a pensar que el sindicato, la UTA, que los tenía que apoyar se iba a borrar? No solo se borraron, que eso era bueno, borrate. Sino la contra que están haciendo. No hablemos del empresario. El empresario era lógico que iba a ser la contra. Ahora yo me pregunto: ¿Qué pasa con la UTA que no quieren que se abran las urnas? ¿Por qué? Vamos a ver qué respuesta me van a dar a todo esto.
PMT: ¿Qué le dirías a esas familias que están peleando por la libertad de su hermano, de su marido, de su hijo, que están presos en Salta por luchar; a la familia de David Ramallo, que es el obrero que mató la patronal en la 60; a los compañeros de Las Heras que pelean por su libertad incondicional?
R: Bueno, antes que nada que siento muchísimo, muchísimo de corazón lo que acabo de enterarme. Y les mando toda la fuerza del mundo, que sigan luchando y que no aflojen. Que tengan toda la bendición de Dios.
PMT: gracias…
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“…A seguirla peleando por nuestra familia y nuestros hijos, que es por ellos que estamos acá…”
“… estamos acompañando a nuestros maridos, en sus derechos: a trabajar… en buenas condiciones, que tengan un baño, una cocina, el horario de espera. Que no les paguen más en negro…”
PMT: ¿Contanos un poco en qué consiste el reclamo que están haciendo?
J: Nosotras estamos acompañando a nuestros maridos, en sus derechos: trabajar bien, en buenas condiciones… que tengan un baño, una cocina, el horario de espera. Que no les paguen más en negro, porque al cobrar en negro les pagan la mitad del día.
Esto empezó por la persecución laboral que ellos tenían y que no se aguantaba más las suspensiones por cualquier tontería. En el caso de mi esposo, la primera suspensión que recibe, él no estaba ni enterado, se la hacen desde debajo de un auto. Fue una notificación porque supuestamente iba adelantado. Y eso no se hace porque hay una ley que dice que tiene que estar firmada por un inspector y le descontaron $2000. Eso me afectó a mí, a mi familia… porque es el único ingreso que tenemos. Y nos perjudicó.
Al otro mes tuvo dos suspensiones más, $4000 y no llegué a fin de mes. Y el reclamo es ese. Que los dejen de perseguir por cualquier cosa, que no los suspendan, que les den un baño, una cocina. Que puedan tener su horario de espera, que lo puedan cumplir. Y no porque llegaste tarde ya lo perdiste y te tenés que ir. Y que se cumplan las 8hs, que no los tengan 16hs arriba de un micro sin descansar. Que se les cumpla el horario, porque a más de uno como a mi esposo les ha pasado que los primeros meses los tenían que un día entraban a las 4 de la mañana, al otro día a las 3 de la tarde y no dormían nada.
Lo que ellos reclaman son condiciones dignas, trabajar dignamente.
PMT: Hubo una represión grande el otro día, no se si Uds estaban… nos podés contar lo que pasó?
J: Yo estaba en camino cuando fue lo de la represión. Sabía que iban a reprimir y no llegué.
La verdad, sin palabras. Estoy indignada, dolida. Porque se los trató como delincuentes a los chicos y son simples trabajadores que reclaman sus derechos. La verdad, sin palabras lo de la represión. No lo podemos creer todavía. Los chicos fueron golpeados injustamente, los llevaron presos como sui fueran delincuentes.
PMT: Ahora, cómo sigue? Sabemos que hay negociaciones, que el gremio de la UTA se junta con el intendente y los empresarios… ¿Cómo viene ese tema?
J: Con ese tema vienen bastante complicados también, porque la UTA no los representa. Tanto el señor intendente, como el ministerio de trabajo, como el empresario, como el gremio… todos en la misma, tiran todos para el mismo lugar. Sabemos que hay plata de por medio y bueno, venimos bastante complicados con eso.
Pero a no bajar los brazos, la vamos a seguir peleando. A esta la ganamos entre todos.
PMT: ¿Cómo seguiría esto? Vinieron distintas organizaciones a apoyarlos, están viendo la posibilidad de coordinarse, de convocar a otros sectores…
J: Si, se está viendo la posibilidad, nos estamos organizando para seguir… este fin de semana nos toca acá…
PMT: ¿El lunes hay una reunión?
J: Si, el lunes hay una reunión con 3 jueces y ahí estaremos. A ver cómo nos va
PMT: Qué les dirías a las compañeras de Salta que están peleando por la libertad de los detenidos, a las compañeras de Las Heras…
J: Que las apoyamos en este reclamo porque estamos del mismo lado, y en el mismo lugar. Yo estoy en la misma posición que ellas y las apoyo. Que les mando toda la fuerza y que no bajen los brazos, que lo último que se pierde es la esperanza. A seguirla peleando por nuestra familia y nuestros hijos, que es por ellos que estamos acá.
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