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La Lucha de Clases Internacional

Noviembre de 2013

¡Basta de esclavitud laboral! ¡Basta de muertes obreras!
¡Fuera Wall Street y la Europa imperialista de Bangladesh y de todo el sudeste asiático!


Masacre de la fábrica textil Rana Plaza

Más del 80% de la mano de obra de la industria textil en Bangladesh son mujeres. Alrededor de 4 millones de obreros dejan sus vidas y las de sus familias en condiciones de brutal esclavitud por salarios de 29 euros mensuales. Su trabajo representa el 80% de las exportaciones para los negocios de las multinacionales imperialistas.
Hoy, a meses de la masacre del Rana Plaza nada ha cambiado. En las instalaciones de las textiles como Fashion Tazreen, que dejara en un incendio 112 muertos en noviembre del año pasado, sus trabajadoras aun denuncian que apenas hay ventilación, está todo lleno de cajas y de telas que fácilmente pueden arder, no se les garantiza agua potable y en la mayoría de los casos se utiliza la de los baños, si es que a ellos llega el agua. Si hay un incendio, es imposible escapar o tratar de apagarlo.

La huella de las masacres marcan las jornadas laborales de las trabajadoras textiles. Los miles de heridos no han encontrado solución alguna a sus miserias, los mutilados son condenados a la mendicidad y los sobrevivientes han quedado sin empleo. Ninguno de los empresarios asesinos responsables de la masacre ha sido juzgado ni les importa el futuro de los explotados que fueron afectados por la masacre. ¡Tribunales obreros y populares para enjuiciar y castigar a todos los responsables de las masacres obreras! ¡Para conseguir mejores condiciones laborales, salario, vivienda, salud, educación  hay que expropiar a todas las empresas de los parásitos capitalistas e impedir que sigan masacrando a los explotados y sus familias! ¡Indemnizaciones de por vida pagadas por las patronales imperialistas y el Estado para todos los explotados mutilados y sus familias y las familias de los asesinados!

En estas condiciones producen las mujeres obreras en Bangladesh para las multinacionales  yankys y de la Europa imperialista,  gerenciadas por los funcionarios de la Liga Awami en el gobierno. Encuentros como el del FSM de Túnez de marzo 2013, el Encuentro de la mujer 2013 a realizarse en noviembre en la Argentina, con su política de “unidad de género” proponen que la mujer explotada de Bangladesh podría encontrar una solución a sus demandas junto a la mujeres explotadoras de la Liga Awami y por fuera de las organizaciones obreras. Tras esta política se centralizan todas las corrientes de la izquierda mundial  sometiendo las demandas de la mujer trabajadora a la colaboración de clases. Esto nos ata las manos para organizarnos y luchar por nuestras demandas.




Sobrevivientes de la textil de Bangladesh

¡La triple explotación a la mujer trabajadora les garantiza enormes ganancias a los parásitos capitalistas!

Las mujeres obreras, con el trabajo doméstico en nuestros hogares aseguramos que nuestros maridos vuelvan cada día  a ser esclavizados en alguna rama de la industria. Así, por un trabajo que es necesario pero que no paga, el patrón se asegura otra enorme tajada de riqueza.
En Bangladesh, los maridos de las obreras que no están empleados en las textiles,  en algunos casos se emplean en las fábricas de ladrillos donde cuatro veces al año ganan por una jornada de 11hs, 100 euros mensuales mientras que el patrón se lleva 53.000 millones de euros al año. Allí la brutal contaminación por la quema de carbón que aniquila su promedio de vida compite con la miseria de sus salarios.


Fábricas de ladrillos

Si “desean” conseguir un salario mejor,  los costos pueden ser aún peores. A cientos de ellos se les arranca la vida en los desarmadores de buques que destruyen las costas del país usando a Bangladesh como un basurero de las navieras europeas que luego exportan esos mismos buques que transportan diessel, a Europa. Un buque grande puede dejar hasta 4 millones de ganancias sin inversión mientras que sus trabajadores no ganan más de 70 y 85 euros mensuales si es que salen con vida de allí. La naviera suele vender el buque en Londres. Este cambia la bandera del barco y lo registra en alguno de los países que no ha firmado la convención internacional que “impide” este trabajo. Así, todo está en “orden” para que pueda ser desguazado en Bangladesh.


"Basta de trabajo infantil!
Pero no termina aquí el gran saqueo y superexplotacion de la mano de obra esclava en la región y especialmente de la mano de obra femenina en uno de los países del sudeste asiático más superpoblados.
Al mismo tiempo que se superexplota la mano de obra femenina, se les arranca la vida de sus hijos, la otra parte del trabajo social que tampoco pagan los esclavistas asesinos de las multinacionales. El sacrificio realizado por la mujer obrera para la crianza del niño es arrebatado por las multinacionales para producir enormes riquezas mientras nuestros hijos padecen las peores de las miserias e ignominias. Desde los 6 años en adelante, cerca de 6 millones de niños menores de 14 años son superexplotados en todas las ramas de la industria; en las textiles; en la industria del metal; en la fabricación de ladrillos; en la agricultura y las niñas fundamentalmente en el trabajo doméstico. Las hijas de los explotados, cerca del 95% de las que trabajan, son usadas como empleadas domésticas y sexuales,  abusadas permanentemente por sus patrones, los mismos que explotan a sus padres en las fabricas. Esto cuándo no son esclavizadas en algún prostíbulo custodiado por la policía y el Estado. Todos ellos en su mayoría trabajan por un promedio salarial de 7 euros mensuales.

¡Basta de miserias y penurias para la clase obrera! ¡Basta de cinismo de la ONU, UNICEF y las ONG agentes de las multinacionales que fingen cínicamente, como lo hacen en Siria, que se interesan por la vida de los niños explotados! ¡Fuera la ONU, UNICEF y las ONG que administran las miserias y hablan de la necesidad de la educación para la mejora de un futuro que ya les es arrancado a los niños de la región por los parásitos imperialistas! ¡Fuera WallMart, Lacoste, H&M, Inditex y C&A! ¡Fuera los parásitos de Europa y Wall Street que saquean del sudeste asiático!
¡Abolición inmediata del trabajo infantil! ¡Aumento de salario ya según el costo de vida! ¡Un salario por hijo para la mujer explotada! ¡Salud, educación, vivienda gratuitas y en condiciones dignas para todos los explotados! ¡Guarderías, comedores, lavaderos, gratuitos a cargo de la patronal y el estado para todas las mujeres obreras!  ¡Derechos sindicales para todas las ramas de la industria! ¡A igual trabajo igual salario!

Los hijas de los patrones de las textiles no son las que limpian las casas de los obreros, ni son violadas ni traficadas como esclavas sexuales por el estado y la policía! No son los maridos de las burguesas los que trabajan como esclavos construyendo sus casas, ni en los buques con riego de vida  en cada minuto de trabajo! No son los superexplotados en las fábricas de ladrillos ni en la cosecha! La mujer burguesa no es la que sale del campo recorriendo miles de kilómetros a pie para conseguir un puesto de trabajo miserable por un trozo de pan en las ciudades! ¿qué une entonces a la mujer explotada de Bangladesh con las explotadoras? ¿qué tiene que ver la vida de las obreras superexplotadas y sus familias  con Merkel, Hillary Clinton, Michel Obama, SheikhHasina la pomposa Primer Ministro de la República Popular de Bangladesh? Estas últimas, junto a sus maridos, y mañana sus hijos, viven como parásitos del trabajo ajeno. ¡Nada une a la mujer trabajadora con los patrones asesinos!

Así viven y mueren las familias obreras en Bangladesh. El gobierno bengalí garantiza estas condiciones defendiendo los intereses imperialistas, de la burguesía de la región y de los 29 diputados propietarios de fábricas textiles. La mitad de ese parlamento tiene intereses directo en la industria. Estas condiciones hacen de Bangladesh el paraíso de las transnacionales. El NPA, la izquierda socialimperialista europea, la izquierda del FSM son cómplices garantes de que se les impongan estas condiciones a millones de explotados. Jamás, ni ante la masacre del Rana Plaza ni frente a las infinidades de denuncias de las condiciones impuestas por su propia burguesía han movido un dedo por los millones de explotados del Sudeste Asiático. ¡La izquierda socialimperialista le cuida los intereses a su propia burguesía!Estas condiciones no podrían imponerse de no ser acompañada de la complicidad y el silencio de la izquierda de Europa y mundial que jamás ha llamado ni encabezado la lucha por que las obreras textiles de la región ganen el salario de las obreras de Europa!
Esta política la paga hoy la clase obrera europea a la que, a la que el sistema capitalista, está llevando a vivir y producir como en Bangladesh.

¡Que nos expliquen que une a una mujer explotada con las mujeres que las esclavizan, que une a un niño esclavo con el hijo del patrón!  ¡Basta de verso!

¡Paso a la juventud! ¡Paso a la mujer trabajadora!

Corresponsal


Niños en fábricas textiles, metalúrgicas,
de globos donde trabajan 12hs x 1,50 euros