En Argentina hay 1.700.000 trabajadoras domésticas que se puede registrar y muchas más en negro, que no figuran en ningún lado.
Ante la pandemia las patronas “temerosas” de que sus empleadas domesticas las contagien de coronavirus las mandan a sus casas pero sin ninguna garantía de sueldo. Las que trabajamos por hora y que con eso le damos de comer a toda nuestra familia nos quedamos sin ingresos para afrontar esta crisis que que estamos viviendo y el aislamiemto sin nada.
Las patronas “progre” y feministas de los barrios privados de la zona norte o los country que no nos mandan a nuestras casas sin salario, no quieren hacer pasar la cuarentena cama adentro limpiándole su mugre pero sin ningún tipo de protección para nosotras. Este trato no es nuevo, ya vivimos lo que es que no te dejen viajar en los mismos micros donde están ellas por que no le gusta “nuestro olor” o mezclarse con nosotras. ¡Hipócritas! ¡A nosotras nos da asco su mugre! ¡A nosotras nos dan asco sus salarios de miseria!
Estamos dejadas a nuestra suerte por parte de todos los sindicatos, ellos saben muy bien que muchas de nosotras somos las mujeres de los trabajadores de la construcción, metalúrgicos, de la carne etc, o somos las que nos ponemos la casa al hombro ante tanta desocupación que hay. Y como si fuera poco el sindicato que dice representarnos, el UPACP, saca una resolución donde dice que el trabajo que realizamos como domésticas es algo esencial. ¡Todo para que nos puedan seguir explotando!
Nosotras denunciamos a todas esas patronas que nos despidieron a muchas de nosotras de hecho, y también a las patronas que nos obligan a trabajar sin respetar la cuarentena que ellas si tienen.
¡BASTA! ¡Nosotras también somos trabajadoras! ¡Queremos licencias pagas por la patronal, queremos obra social y un salario acorde a la canasta familiar! ¡Nosotras y nuestras familias no somos inmunes al coronavirus y mucho menos ante el “virus” del hambre! ¡Nuestros hijos también merecen hacer la cuarentena junto a sus padres!