En un país que lidia con una crisis económica severa, muchos temen que los pasos para refrenar el coronavirus golpeará duro a los pobres.
Mnangagwa declaró el desastre nacional por el coronavirus. El COVID-19 ha contagiado a siete personas en Zimbabwe y causó la muerte de una, el trabajador de prensa de 30 años Zororo Makamba. El líder del MDC-Alianza, Nelson Chamisa, alabó la decisión del presidente Mnangagwa de cerrar el país por 21 días como medida para contener el Covid-19. Esto demuestra su apoyo total al plan del gobierno, que no hará más que causar aún mayores padecimientos a los trabajadores y el pueblo pobre.
La amenaza de la nueva enfermedad no podría haber llegado en peor momento para millones de zimbabwenses que ya están luchando contra una crisis económica que se agudiza, causando aumento de los precios de los alimentos, salarios estancados, falta de agua y de electricidad con apagones diarios.
Mientras tanto, la inflación anual de Zimbabwe se elevó a más del 500% en febrero. La tasa de desocupación es más del 90%. Los medicamentos son escasos y las arcas exhaustas del estado significa que el gobierno no puede comprar los suficientes suministros para las ya debilitadas instalaciones médicas estatales.
La auto-cuarentena es elitista, y solo la burguesía puede darse el lujo de hacerla. Los trabajadores y el pueblo pobre siempre sufren el grueso de todas las pandemias, por la pobreza abyecta y porque la burguesía les arroja toda las crisis.
Los obreros de las industrias y servicios declaradas “esenciales”, aquellos que verdaderamente garantizan que todo funciona durante la cuarentena, siguen trabajando sin ninguna protección, expuestos al contagio y la muerte. Entre ellos están los trabajadores de:
- Instituciones Bancarias
- Supermercados y reventa de alimentos
- Venta de combustible
- Farmacias
- Laboratorios
- Proveedores de salud
- Transporte para que se trasladen los trabajadores de servicios esenciales, etc.
Cierre para los pobres y el sector informal. Pero las cosas van a ser como siempre para los patrones y los capitalistas, dejando a los trabajadores totalmente a merced de los patrones.
¿Los patrones y los obreros “enfrentan juntos” la crisis? ¡Farsantes! ¡Estamos gobernados por un puñado de explotadores que le garantizan sus ganancias, en medio de un infierno para la amplia mayoría del pueblo! Los generales de la dictadura militar, el ZANU-PF y también el MDC, que como dijimos ha elogiado las medidas tomadas por Mnangagwa, están juntos contra los trabajadores. Ellos multiplicaron por mil los sufrimientos que los obreros padecen con la crisis económica.
Pero saben que la miseria y la pandemia podrían muy bien causar un estallido de los explotados.
Necesitamos movilizarnos por una respuesta real, pro-obrera al coronavirus. Se debe imponer en la calles un Plan Obrero de Salud de Emergencia ya, que garantice que el pueblo no pague la crisis ni se detenga ante cualquier privilegio o derecho de propiedad, para hacer que estén disponibles los recursos necesarios para un plan de salud para la población. Desde la ZCTU, las organizaciones obreras, estudiantiles combativas y médicos se debe poner en pie un comité de salud pública para que el pueblo sobreviva a la pandemia y al hambre la desocupación y la miseria.
El pueblo debe hacer la cuarentena, pero con salarios igual a la canasta familiar para todos los trabajadores, ocupados y desocupados, con alimentos y todos los servicios necesarios garantizados, y los que trabajan en sectores esenciales deben contar con todas las medidas de prevención, higiene y seguridad. ¡Hay que nacionalizar sin pago los bancos y las minas para poner todos los recursos para la salud y la alimentación del pueblo! ¡Expropiación sin pago de todas las transnacionales que saquean Zimbabwe! ¡Ni un dólar para el pago de la deuda externa! ¡Fuera el FMI!
¡Hay que poner en pie comités de consumidores, campesinos pobres y trabajadores agrícolas para garantizar que haya alimentos! Hay que expropiar las grandes extensiones de tierra sin indemnización y a toda la cadena de intermediarios de alimentos para garantizar que no falte comida en la casa de los trabajadores y el pueblo pobre.
En esta cuarentena, tenemos que tener las máximas condiciones de salud e higiene y vivienda digna para los explotados. ¡Expropiación sin pago de los hoteles y de todo aquel que posea más de dos inmuebles dedicados al lucro para garantizarle un techo digno a los explotados para que puedan hacer la cuarentena!
Que nadie vaya a trabajar, si no está bajo control de doctores de todos los servicios sociales de salud en defensa de los trabajadores.
Los de arriba solo piensan en ellos y sus ganancias, ¡no delegamos en los patrones!
¡La clase obrera debe dirigir la lucha contra la pandemia del coronavirus!
¡Basta de dictadura militar! ¡Por un gobierno provisional revolucionario de trabajadores y campesinos pobres!
Workers International League (Liga Obrera Internacional) de Zimbabwe