¡Justicia para Antonia!
Las mujeres trabajadores y las jóvenes levantaron barricadas exigiendo justicia, solo el fuego revolucionario de los de abajo podrá conseguirla
¡Sin justicia, no hay paz!
Hoy los tribunales pinochetistas con sus jueces y abogados, “juzgaron” al violador Martin Pradenas, acusado de violación a 5 mujeres, las medidas que le dio el tribunal fueron darle arraigo nacional, arresto domiciliario y alejamiento de las víctimas, medidas totalmente insuficientes y que lo dejan prácticamente en libertad . Antonia Barra, fue una joven que también fue víctima de este violador, fue tanto el dolor de Antonia que llego al punto de quitarse la vida el pasado 13 de octubre de 2019. Así la familia busco hacer justicia, pero la misma en las manos del pinochetismo, solo permitió encubrir y dejar libre a este violador.
Esto fue una verdadera provocación que despertó la indignación y la rabia de las mujeres trabajadoras y jóvenes, desde Arica a Punta Arenas, las mismas con sus propias manos levantaron barricadas en las esquinas de cada barrio obrero, hicieron velatones, cacerolazos y se concentraron en las plazas de cada cuidad y marcharon como fue en Concepción, Talca, Punta Arenas, Temuco, Santiago y muchas ciudades más, en cada ciudad se repetían las siguientes consignas “¡Justicia para Antonia!”, “¡Que muera Piñera y no mi compañera!”, “¡Alerta alerta alerta machistas que todo el territorio se vuelva feminista!” o “¡Si violan la cuarentena van presos, si nos violan a nosotras no!”
En Temuco la ciudad en donde vivía Antonia y también su agresor, se reunieron más de 2000 mujeres, las cuales marcharon a la casa del mismo ya que no permitirán que quede impune el caso de Antonia y las otras cuatro mujeres, previo a este masiva movilización un grupo de mujeres y niñas ya estaban en el frontis de la casa en donde vive Martin. Ante la valiente movilización que se le venía encima, él y su familia, de forma cobarde y miserable arrancaron en una camioneta, la misma la tomaron posteriormente que saltaran la muralla trasera de su hogar, esto ocurrió con la completa complicidad de la policía asesina que resguardaba la casa, pero aun así cientos de mujeres llegaron a los alrededores de la casa de Pradenas y se enfrentaron valientemente a los “pacos” (policía) que respondieron con el carro lanza aguas y gases para dispersar la movilización. Represión que se repitió en cada región y localidades del país que se movilizaron por Antonia, solo en la Región Metropolitana ya se contabilizan 150 detenidos, en su mayoría mujeres. En la región de Valparaíso se comenzaron a movilizar las tanquetas de los milicos asesinos para reprimir la lucha que está en curso.
Pero lo que no podrán dispersar es el odio y las ansias de hacer justicia de millones de mujeres y jóvenes obreras, que ven en Antonia todos los padecimientos que tienen que vivir diariamente. Con todas las muestras de movilizaciones que se hicieron en todas las regiones del país, se dejó en claro a esta maldita justicia, al gobierno y al régimen que no se les tiene miedo, que no se retrocederá por hacer justicia por todas las mujeres que han sufrido en manos de sus agresores y este sistema que los avala. Que no se dará pie atrás hasta conseguir la dignidad, hasta que caiga Piñera y la maldita constitución del 80’.
¡No quedara en la impunidad el caso de Antonia!
¡No quedara en la impunidad el caso de ninguna compañera más!
¡Por tribunales obreros y populares para juzgar y castigar a Martin Pradenas!
¡Que los mismos juzguen y castiguen a todos los pacos, milicos, curas y violadores que han agredido, violentado y asesinado a las mujeres, y que han quedado impunes!
¡El gobierno de Piñera, el régimen y el estado son responsables de la impunidad!
¡SIN JUSTICIA NO HAY PAZ!
Corresponsal del Paso a la Mujer Trabajadora