Sudán– 8 de junio de 2019
Luego de que el PC, en un frente con partidos burgueses, llevara a las masas a presionar al Consejo Militar de Transición para hacer con ellos una apertura democrática y un “gobierno civil”
La dictadura militar ataca violentamente a los explotados sudaneses sublevados
¡Disolución de la casta de oficiales genocida!
¡Hay que poner en pie el poder de los de abajo!
El 3 de junio fuerzas de seguridad, bajo el mando del Consejo Militar de Transición que gobierna hoy Sudán, atacaron brutalmente a los explotados que se encontraban acampando en la plaza frente al Cuartel General del Ejército en Khartoum. Disparando balas de plomo, quemando sus carpas, bloqueando el paso de los heridos para que no lleguen a los hospitales, asesinaron cerca de 100 manifestantes y dejaron cientos de heridos. Luego atacaron las zonas de los alrededores de la plaza y de la ciudad, disparando a todo aquel que saliera de sus casas, violando a las mujeres, saqueando e imponiendo el terror.
Aunque declaren que ellos no fueron y manden falsas condolencias a las familias de las víctimas, esta jornada contrarrevolucionaria del 3 de junio en Khartoum fue planeada por los generales del Consejo Militar. Prueba de esto, es que los días previos, los generales sudaneses dieron la orden de desarmar a los suboficiales y los soldados, porque sabían que al venir la represión, estos se podían pasar del lado de las masas para defenderlas, tal como ya sucediera hace casi dos meses.
Este ataque es parte de un mismo plan contrarrevolucionario del imperialismo en África y Medio Oriente, como lo son el recrudecimiento de los bombardeos en Idlib –Siria- y la ofensiva de Al Assad y Putin contra las últimas trincheras de la revolución. Es parte de la represión en Argelia junto al papel jugado por las direcciones de la lucha de las masas, que ha estancado la situación por el momento. Es parte del sionismo masacrando en Gaza. Es parte de la represión, persecución y cárcel de la teocracia iraní. Es parte de la dictadura de Egipto manteniendo 40.000 presos políticos, con centenares de condenados a muerte, ejecutando a varios de ellos cada mes.
Se trata de una respuesta imperialista a la segunda oleada de sublevaciones de las masas, como fueron los últimos levantamientos de Argelia, Sudan. Es que el imperialismo yanqui necesita que no quede ni vestigios de estas sublevaciones para poder terminar de asentar la masacre en Siria y avanzar en nuevas ofensivas, por ejemplo, como intenta hacerlo sobre Irán para quedarse, con los negocios directamente.
Es así que el sangriento ataque a las masas de Sudán persigue el objetivo de sacarlas de las calles a los tiros, aplastar los heroicos combates de las masas, que comenzaron a fines de diciembre de 2018 y que desde el pasado 6 de abril rodean el cuartel general del ejército. Ya vienen del pasado 11 de abril de derrocar al dictador Omar al Bashir y el Consejo Militar de Transición que asumió a su caída no puede permitir que la lucha avance y termine derrocando a todo el régimen de la dictadura militar.
Este ataque viene como consecuencia de la política del Partido Comunista sudanés, que dirige a la gran mayoría de las organizaciones obreras. Ellos, integrando el denominado Frente de la Fuerzas por la Libertad y el Cambio junto con partidos burgueses opositores a Bashir, se montaron por sobre los combates de masas y los llevaron a protestas pacíficas por presionar a la dictadura militar a hacer un gobierno conjunto -al que llaman “gobierno civil”-, tal como habían negociado hace casi un mes.
Le hicieron creer a las masas que negociando y presionando pacíficamente una dictadura militar se podía hacer un gobierno en donde estuvieran estas fuerzas opositoras a Bashir con generales, que serían “progresivos” o “democráticos” y que este gobierno pondría fin a la dictadura y a las penurias de las masas.
De esta manera llevaron a las masas a una encerrona. No solo porque dicha salida que proponía el PC preservaría al conjunto de la casta de oficiales que viene de gobernar con Bashir hambreando a las masas y cometiendo incontables masacres como en la zona de Darfur. Sino porque dejaron a las masas desarmadas a los pies de la voluntad de los generales de Bashir… y estos actuaron como lo que son: represores genocidas. Por ello lo que vino fue un ataque contrarrevolucionario, heridos, muerte y una feroz masacre.
Luego de este ataque, el generalato anunció que no habría ningún “gobierno civil” y que convocaría a elecciones en 9 meses, para inclusive presentarse ellos y poder asumir el poder legitimados tras elecciones. Estamos ante una triste redición de lo sucedido en Egipto. Allí los movimientos y las fuerzas “progresivas” se montaron sobre el alzamiento de las masas sublevadas en 2013 contra el gobierno de los Hermanos Musulmanes y llamaron al ejército a que intervenga para juntos instaurar un gobierno “democratico”. Y así lo hicieron y el ejercito lanzó las tropas a las calles aplastando a las masas sublevadas y el resultado para los explotados no fue obtener mas democracia sino una masacre que impuso una dictadura aún peor que la anterior, inclusive legitimada por elecciones.
Ante esta situación en Sudán, el PC ha convocado a la “desobediencia civil”, llamando a que las masas salgan a las calles, que realicen paros, protestas y todo tipo de acciones. Así, sin llamar a ninguna acción coordinada ni centralizada, sin poner en pie comités de autodefensa armados, divide las fuerzas de las masas y las dejan en multiples acciones aisladas a merced de una represión superior.
Para que las masas sudaneses no tengan el mismo destino que los sublevados egipcios y puedan hacer realidad su grito de que caiga el regimen, necesitan una ¡Huelga general revolucionaria con acciones en las calles hasta que caiga todo el régimen! ¡Abajo el Consejo Militar de Transición, continuador de la dictadura de Bashir! Los sindicatos y las organizaciones obreras cuyas direcciones están en ese Frente con partidos burgueses en un pacto con los militares tienen que romper con la burguesía y ponerse a la cabeza de las acciones de masas.
¡Hay que disolver y desarmar a la casta de oficiales! ¡Hay que poner en pie el poder de los de abajo! Por un gobierno obrero, campesino revolucionario, basado en Consejos de trabajadores, campesinos y soldados armados!
Solo este gobierno podrá terminar con el hambre, la miseria y el saqueo imperialista y además podrá unificar a todos los explotados del Norte, del Sur, sean de Darfur, del Nilo Blanco, etc. Los miles de refugiados que se encuentran en verdaderos campos de “concentración” podrán regresar a sus hogares de los que tuvieron que huir por guerras fratricidas y represión sangrienta.
Ante este sangriento
ataque, los explotados tienen todo el derecho de defenderse de las fuerzas represivas ¡hay que armarse y poner en pie los Comités de autodefensa! ¡Ni una gota más de sangre de los explotados sudaneses!
¡Que los soldados rasos desacaten a sus oficiales y formen sus comités para luchar junto al pueblo sublevado!
¡No podemos permitir que asesinen a nuestros hermanos sudaneses! ¡Ganemos las calles del mundo en apoyo a nuestros hermanos de clase de Sudán!
Desde la sublevación de los explotados de Sudán, el levantamiento de Argelia, la lucha de los trabajadores iraníes, hasta la resistencia siria que no se rinde, las masas de Gaza que aún cercadas y masacradas siguen peleando contra el sionismo… ¡En todo Magreb y Medio Oriente, un mismo combate revolucionario contra un mismo enemigo, el imperialismo y todos sus lacayos!
Ana Negri y Leandro Hofstadter